EnglishEl gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, decretó, el domingo 3, poner un fin a la persecución del uso medicinal de marihuana en la isla. A través de un comunicado de prensa, el gobernador explicó la decisión poniendo como ejemplo el uso del cannabis para uso medicinal en otras jurisdicciones estadounidenses.
La orden autoriza con efecto inmediato a la secretaria del Departamento de Salud de Puerto Rico, Ana Rius, a permitir el uso medicinal de “de algunas o de todas las sustancias controladas o componentes derivadas de la planta de cannabis”.
El gobernador demandó asimismo a Rius que realice un informe para presentar dentro de los próximos tres meses, “detallando los esfuerzos realizados para el cumplimiento de esta orden, los resultados obtenidos y el plan de trabajo a seguir”.
Padilla mencionó que existen varias investigaciones sobre los usos terapéuticos de la planta del cannabis: “estas investigaciones avalan el uso de la planta de para aliviar el dolor que causa la esclerosis múltiple, el virus del sida, glaucoma, Alzheimer, migraña, Parkinson y otras enfermedades que a menudo no responden a tratamientos tradicionales”.
Comentó también que los pacientes que reciban el tratamiento recibirán nuevas esperanzas y mayores expectativas de vida.
Como resultado de este decreto, la marihuana modificará su estado legal para pasar de ser una sustancia controlada y prohibida a una sustancia para el uso medicinal y por tanto será sujeta de impuestos, por lo que algunos puertorriqueños afirmaron, en las redes sociales, temer que la aprobación tenga un fin meramente fiscalista.
En la cuerda floja
El Estado Libre Asociado está en recesión hace más de ocho años y tiene una deuda pública que llega a los US$73 mil millones. La legalización de la marihuana, advierten, podría traer ingresos a las arcas públicas y por otro lado, desplazar el eje del debate del profundo problema económico que aqueja hoy a la isla.
El jueves 30, el Congreso de Puerto Rico rechazó un proyecto de ley para reformar el sistema impositivo en la isla. La propuesta habría aumentado las arcas públicas y ayudado a la administración de Padilla a sortear la crisis fiscal.
Por su parte, el gobernador indicó que el hará todo lo que esté a su alcance para arreglar la pesadilla financiera.
Este lunes, el equipo económico se estará reuniendo con el gobernador para debatir el presupuesto 2015-2016, que entra en vigencia el 1 de julio, y ver de qué manera recortan US$1.5 mil millones del gasto público.
Luego de conocer el resultado de la votación legislativa, Padilla advirtió a los boricuas que deben “estar preparados” porque los ingresos no superaran los gastos que necesita su administración para operar.
Puerto Rico se suma a la lista de estado norteamericanos que ya avalan el uso medicinal de la marihuana: Alaska, Arizona, California, Colorado, Washington DC, Hawaii, Maine, Michigan, Montana, Nevada, Nuevo México, Nueva Jersey, Oregon, Vermont, Rhode Island, y Washington.
Entre los críticos del decreto se encuentra Luis Davila, abogado y analista de noticias que, si bien favorece la despenalización, cuestiona el hecho de que Padilla haya esquivado el Congreso.
La legalizacion de la marihuana es facultad inherente del legislativo, no del ejecutivo!
— LUIS R DAVILA-COLON (@DAVILACOLON) May 3, 2015
“Son trampillas de pichón de dictador. Eso le corresponde al Gobierno Federal de Estados Unidos o a la legislatura de Puerto Rico. No al Ejecutivo”, sostuvo.
Cientos de locales salieron a las calles de San Juan el pasado 20 de abril para demandar la legalización de la marihuana. La protesta, convocada por Free Juana —una fundación local que apunta a la liberalización del cannabis y a liberar a los usuarios de las prisiones— contó con el apoyo de políticos, entre ellos el legislador Miguel Pereira.
“La marihuana es menos nociva que el alcohol y el cigarrillo, por lo que nadie debería ser penalizado por elegirla”, sostuvieron desde Free Juana. Lamentan asimismo que miles de jóvenes y ciudadanos son arrestados por el consumo de esta planta en más de 30 países.