EnglishA pesar de que, el domingo en la noche, parecía que la crisis política en Haití estaba cerca de resolverse, la reticencia de un partido opositor a suscribir un acuerdo abre la puerta para que el presidente Michel Martelly pueda gobernar mediante decretos que no requieren de aprobación legislativa.
Los legisladores fracasaron este lunes en aprobar una nueva ley electoral que extendería sus mandatos y permitiría al Parlamento continuar en funcionamiento. El presidente Martelly no convoca a elecciones legislativas desde hace tres años, y como resultado, el mandato de los 99 diputados, y de 10 de los 30 senadores, ha expirado este lunes 12 de enero, dejando sin quórum a ambas cámaras. Ahora, ante un Parlamento inactivo, el presidente haitiano podrá gobernar por decreto.
Martelly anunció este domingo 11 de enero que había alcanzado un acuerdo de último minuto con la oposición para celebrar elecciones antes de que finalice 2015. Sin embargo, la ausencia del partido izquierdista Fanmi Lavalas truncó el pacto.
Desde 2011, año en que se celebraron las últimas elecciones legislativas, legisladores de la oposición bloquearon los comicios en varias oportunidades, acusando al presidente Martelly de designar a sus propios partidarios en la autoridad electoral.
“La lucha es realmente por un proceso justo. No uno indebidamente influenciado por el Ejecutivo”, dijo a Vice News Brian Concannon, director ejecutivo del Instituto para la Justicia y la Demcoracia en Haití “Martelly nunca dijo que gobernará sin supervisión. En cambio, propone alguna manera de avanzar hacia las elecciones que no alcanza los requisitos constitucionales”.
En noviembre de 2014, el presidente Martelly prometió celebrar elecciones en el caso de que se vea obligado a gobernar por decreto.
Protestas antigubernamentales
En los últimos días se incrementaron las protestas contra el presidente Martelly. El sábado 11 y domingo 12 de enero, cientos de haitianos salieron a la calle para demandar la renuncia del mandatario.
El sábado, unas 1.500 personas en Puerto Príncipe, la capital haitiana, participaron de una manifestación que terminó con un enfrentamiento entre los manifestantes y la policía. Las fuerzas antimotines arrojaron gas lacrimógeno y agua para dispersar a los opositores de Martelly. Al día siguiente, los incidentes se repitieron.