La Universidad de Córdoba (UNC) firmó un convenio marco con la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), antigua Secretaria de Inteligencia (SIDE). El acuerdo permitirá la “promoción de acciones conjuntas entre las partes, tendientes a la colaboración recíproca”, explicó el rector de la UNC, Francisco Tamarit.
Varios representantes del Consejo Superior de la UNC esperaban más detalles que explicarán el motivo real de la nueva alianza. Tamarit explicó que es una “carta de intención de colaboración” y que no existía un convenio específico por concretarse. El efecto jurídico del acuerdo habilita a cada decano y al rector a celebrar tratados específicos con la AFI, pero Tamarit negó que existiera algún compromiso desde alguna de las 13 facultades o desde el área central. Sin embargo, las autoridades de la AFI anunciaron hace menos de tres meses que la universidad incorporaría personal al organismo y profesionalizaría a sus agentes.
La vicerrectora, Silvia Barei, se encargó de firmar la resolución rectoral 1878/2015, la cual no contiene muchos detalles sobre la colaboración entre ambas partes por su carácter de “marco”. Por otra parte, sí especifica que la cooperación se dará en los campos “académico, científico, funcional e institucional”. Asimismo, dentro del texto se explica que el financiamiento de las actividades derivadas será en conjunto y que el acuerdo será renovado de forma automática, después de dos años de duración, si ninguna de las partes interviene en su terminación.
La decisión de crear la AFI, y eliminar la SIDE, ocurrió luego de la muerte del fiscal federal Alberto Nisman, cuyo caso sigue sin tener respuestas concretas. El Gobierno argentino creyó oportuno intervenir, luego de doce años, en la estructura de servicios secretos. El director general de la AFI, Oscar Parrilli, informó que el nuevo organismo incorporó una gran cantidad de personal, entre 200 y 250 personas, además de crear convenios con cinco universidades públicas.
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Parrilli explicó que los acuerdos fueron una encomienda propuesta por la presidenta Cristina Kirchner “en este proceso de transformación y transparencia que hemos iniciado en la Agencia Federal de Inteligencia”. No obstante, esta decisión ha sido criticada por la bancada opositora en el parlamento argentino, por sospechas de que el kirchnerismo busca incorporar militantes oficialistas como agentes secretos.
El presidente de la Unión Cívica Radical (UCR), Ernesto Sanz, manifestó su desacuerdo: “Cayeron en lo peor, transformar la militancia política en buchones capaces de perseguir a otros militantes, armar carpetazos y otras perversidades. ¿Adónde fue a parar la reforma de inteligencia?”
Fuentes: La Política Online, Alfil.