Las farmacias de toda Argentina suspendieron, desde la medianoche de este jueves 16 de junio, el despacho de medicamentos a los jubilados afiliados del Programa de Atención Médica Integral (PAMI), por la millonaria deuda que tiene esta obra social que está bajo el control del Estado.
El PAMI es una obra social que atiende a jubilados y pensionados, personas mayores de 70 años sin jubilación y ex combatientes de la Guerra de las Malvinas.
El titular de la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA), Raúl Mascaró, señaló que el PAMI adeuda a las farmacias ARS$ 2.500 millones (US$ 181.775.000) y, según comenta, la cifra se “agranda mes a mes”. Agregó que ya se está en la mitad de junio y hasta ahora no han podido cobrarle al PAMI el mes de febrero.
“Las droguerías nos están cortando las cuentas por falta de pago y se está resintiendo la atención no sólo al jubilado, sino también a toda la seguridad social (…). Se ha tirado de la soga hasta que se llegó a un límite insostenible para las economías de las farmacias” señaló Mascaró.
“Los que tienen que velar por los jubilados es el PAMI y el Estado. Las farmacias colaboramos, hemos puesto el hombro hasta el último momento, garantizamos la mejor atención posible, pero en la medida que podamos cobrar. No podemos hacernos cargos de pagarle los remedios a los jubilados”, agregó Mascaró a la radio Pulxo951.
El Colegio de Farmacéuticos de Buenos Aires señala en un comunicado que las farmacias se ven imposibilitadas de hacer frente a sus compromisos con los proveedores y se enfrentan al corte de su capacidad de aprovisionamiento de medicamentos, así como a una incapacidad de brindar servicio a todos los pacientes, “sean o no afiliados al PAMI”.
“Los abuelos se han quedado sin medicamentos y sin farmacias, pero también se pone en riesgo la atención del resto de las obras sociales porque las farmacias no pueden reponer los medicamentos”, advirtió Giorgina Giralde, vicepresidenta del Colegio de Farmacéuticos de la provincia de Córdoba.
El titular del PAMI, Carlos Javier Regazzoni, aseguró este jueves que están trabajando para resolver el conflicto por el cual los farmacéuticos de todo el país tomaron la medida.
“El PAMI no puede asumir aumentos [a los precios] de los remedios que han venido impactando desde el año pasado hasta ahora, y que son imposibles, no se pueden trasladar a la obra social. No se puede pretender que el dinero de los jubilados pague aumentos que no se pueden convalidar”, expresó.
El funcionario aclaró que el convenio “es entre los laboratorios y las farmacias”. Aseguró que el martes el PAMI pagó ARS$ 930 millones (US$ 67.638.900) y que la semana próxima completarán el pago del mes.
“Entendemos la situación de las farmacias, pero nuestro acuerdo es con los laboratorios, a los que les pagamos”, señaló Regazzoni.
Según su evaluación “la mayoría de las farmacias están atendiendo al PAMI normalmente”.
Para el martes de la semana que viene está planteada una reunión de representantes de la Confederación Farmacéutica Argentina con el titular del PAMI, para tratar de encontrar una solución a la deuda.
La semana pasada el ex director ejecutivo del PAMI, Luciano Di Césare, fue procesado por el delito de administración fraudulenta durante su gestión, mientras gobernaba Cristina Kirchner. Di Césare habría liquidado vacaciones no gozadas por más de un millón de pesos (US$ 72.680).