English No menos de 184 lobos deben ser sacrificados en Columbia Británica, Canadá, para poder salvar al caribú (reno), según una declaración del Gobierno de esa provincia. El Ministerio de Bosques, Tierras y Operaciones de Recursos Naturales anunció el 15 de enero que planean solucionar lo que ellos consideran como una amenaza depredadora de los lobos en las áreas de las montañas de South Selkirk y de South Peace, aledañas a la frontera con los Estados estadounidenses de Washington y Idaho.
El caribú, uno de los símbolos nacionales más reconocidos de Canadá, “está en alto riesgo de extinción local,” según lo expresado por el ministerio.
El Gobierno alega que la población de caribúes de South Selkirk descendió de 46, en 2009, a tan solo 18 en marzo de 2014; y, además, que “la evidencia apunta a los lobos como la principal causa de mortalidad”.
El ministerio estimula a las ciudades circundantes a unirse a un proyecto de investigación conjunta entre los oficiales de Columbia Británica, los Estados de Washington y Idaho, las Naciones Originarias de Canadá, el Servicio Forestal de EE.UU., y el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE.UU., que encontraron en los últimos 10 meses a lobos matando a dos de los caribúes restantes.
Las autoridades también alegan que en el área de South Pearce, habitan cuatro manadas de caribú. Al menos un 37 % de toda “la mortalidad adulta (de caribúes) ha sido registrada como depredación por lobos”.
A fin de “eliminar” los lobos de estas áreas, el gobierno va a desplegar “francotiradores entrenados” para disparar a los animales desde un helicóptero. La operación costará más de US$500.000.
Esta última matanza de lobos sigue a la muerte de más de 1.000 lobos en el bosque de Alberta, entre 2005 y 2012, en el intento de proteger a 100 caribúes que viven en el área.
Sin embargo, mientras la caza de lobos en Alberta estabilizó los números de caribúes en la región, no resultó en un aumento de su población, según un estudio publicado en noviembre de 2014 en el Canadian Journal of Zoology.
Instead of protecting the required habitat, B.C. government decides to shoot nearly 200 wolves http://t.co/5p6LiWN4WQ Shame! #scapegoating
— Luca Borger (@lucaborger) January 26, 2015
“En vez de proteger el hábitat necesario. El gobierno de C.B decide disparar a cerca de 200 lobos ¡Vergüenza!”
La Guerra contra los lobos
Ian McAllister, director de conservación de Pacific Wild, considera que el enfoque del Gobierno en los lobos ignora el problema real concerniente al hábitat de los caribúes.
“El Gobierno no avanza en la protección de adaptar espacios suficientes para los hábitats para los cabirúes, usa, en cambio, a los lobos como chivos expiatorios, y planeando una serie de matanzas aéreas en los próximos meses”, expresó McAllister. “Esta es una verdadera guerra contra los lobos en la Columbia Británica.”
McAllister, quien inició una petición en línea contra la matanza, le dijo al periódico local Province que la amenaza fundamental al caribú es la invasión humana y la destrucción de su ambiente natural.
“Aunque mate a todos los lobos de esta provincia, el Gobierno no salvará a esos caribúes. Pero igual está matando lobos”, señaló.
Por otra parte, McAllister alega que la matanza de los lobos por parte del Gobierno viola los lineamientos impuestos por el Consejo Canadiense de Protección de los Animales con relación a la eutanasia de la vida animal.
De acuerdo con los lineamientos, el único “método aceptable” para la eutanasia animal produce “muerte con dolor mínimo y angustia, cuando es usado en animales conscientes o sedados.”
“No existe manera en la que ellos puedan matar a tantos sin fallar disparos y herir animales,” explicó McAllister a Province. “Habrá lobos heridos que merodearán por casas en localidades remotas… sus sufrimientos serán extremos”,
“Imprudente e inhumano”
David Shellenberger, quien se describe a si mismo como un defensor de la libertad internacional y del bienestar de los animales, le dijo al PanAm Post que el asesinato en masa de lobos en Columbia Británica es típica del trato del Gobierno a los lobos y a otros depredadores.
“Casi siempre los Estados se sirven a sí mismos y a sus aliados”, comentó Shellenberge. “Cuando se trata de los lobos, esto significa hacer licitación de las industrias de la caza y la ganadería. Los Gobiernos también tratan el miedo a los lobos, explotando la ignorancia y el prejuicio”.
Canada Wants to Kill Wolves to Save Another Species. And it never works. #Humansaretheproblem #habitat http://t.co/xunb2mwIKp via @TakePart
— Jen ? Plant-Powered Autistic? Equity = Peace (@jen_lockett) January 22, 2015
“Canadá quiere matar lobos para salvar a otras especies. Y nunca funciona. #Humansaretheproblem #habitat http://tak.pt/i/FH8EMXIE vía @TakePart.”
Shellenberger explica que los lobos benefician a sus presas, incluyendo a los caribúes; y argumentó que ellos son “esenciales para la salud ecológica general de los hábitats”.
“La disminución de los caribúes,” expuso, “es el resultado del mal manejo de la tierra por parte del Gobierno; no es culpa de los lobos. Matar lobos es imprudente e inhumano. Los lobos no son solo esenciales para la ecología, sino también intrínseca y económicamente valiosos”.
Existen maneras más efectivas para preservar a las manadas de caribúes, explicó Shellenberge, sin sacrificar a otras especies. “La respuesta a largo plazo para el beneficio de la población de caribúes es una mejor administración de la tierra, idealmente a través del gobierno, dándole propiedad a las organizaciones de conservación y creando estructuras confiables”.
“Una posible respuesta inmediata,” agregó, “es la cría de caribúes”.