El diputado venezolano Williams Dávila demanda ante instancia internacionales a las autoridades de Nicaragua tras haberlo detenido y deportado a pesar de su inmunidad parlamentaria.
El pasado 4 de agosto fue detenido en el aeropuerto de Nicaragua sin explicación alguna, y fue despojado de su teléfono celular; esto por intentar ingresar al país gobernado por Daniel Ortega para respaldar a sus homólogos nicaraguenses que fueron expulsados de sus curules.
El diputado venezolano asegura que con su detención se violaron convenios y tratados internacionales porque las autoridades de ese país lo acusaron de ser “una de las personas más peligrosas de América del Sur”.
Dávila señaló que no existía ninguna orden judicial: “Todo se trata de una arbitrariedad de parte de las autoridades de Nicaragua”. Acotó que investigó y no halló expedientes levantados en su contra.
“Recibí una llamada de un representante de la DEA en la que descartan que haya trámites o investigaciones en mi contra. Ahí estaría Nicaragua cometiendo un delito, porque está fabricando falsos positivos”; señaló.
Al final, el opositor regresó a Venezuela a bordo de un vuelo de la aerolínea Avianca vía Salvador – Bogotá – Caracas.
Dávila, es uno de los tres parlamentarios de la oposición, junto a Luis Florido y Ángel Medina, que tenían previsto ingresar a Nicaragua para reunirse con sus homólogos. Sin embargo, las autoridades de migración del presidente Daniel Ortega no los dejaron ingresar.
El objetivo de la delegación parlamentaria era llevar un agenda en solidaridad con los 28 diputados que se oponen a Ortega y que recientemente fueron destituidos.
Fuente: El Nacional