EnglishEn promedio, a nivel mundial, a una empresa privada le toma 264 horas laborales al año tramitar el pago de impuestos —33 días en total—, paga más de 25 tipos de aranceles y tiene una tasa tributaria total de al menos 40,9% de las ganancias netas. Estos son los hallazgos del estudio “Pagando impuestos: una perspectiva global” que por décimo año consecutivo publicó la consultora PWC, como aliada del Banco Mundial.
El informe de 175 páginas publicado este 20 de noviembre analizó con datos de 2013 los sistemas para rendir tributos a los Gobiernos bajo la legislación de 189 países.
En comparación con 2012, a nivel mundial las empresas deben pagar un 0,1% más en impuestos a las ganancias; disminuyó en 0,3% el pago a otros tipos de tributos; y solo los impuestos laborales mantuvieron su promedio.
PWC concluye que los sistemas impositivos alrededor del mundo están cambiando debido a la globalización, los adelantos tecnológicos, las modificaciones de la demografía y el cambio climático.
Por ejemplo, el 43% de los países poseen un sistema de pago electrónico y este es el preferido por las compañías. El estudio reporta que alrededor del mundo se realizaron 379 cambios de legislaciones tributarias en 2013, 105 de estas relativas al pago por Internet.
En 2013 el Oriente Medio continuó siendo el pionero en sistemas impositivos al ser la región en la que menos se tributa y en la que esta actividad ocupa menos tiempo. Sin embargo, sigue rezagada en el pago electrónico.
En comparación con el año anterior, África fue el continente que experimentó más cambios positivos en la facilidad del pago al fisco. Asia y Europa del Este fueron las zonas que realizaron más cambios legislativos en torno a sus sistemas de administración fiscal, pero al mismo tiempo retrocedieron al aumentar sus tipos y tasas impositivas. La región de Asia-Pacífico se mantuvo con la menor variación, y América del Norte registró una disminución de un 2,5% en cargas impositivas.
América Latina: la región más lenta
En la mayoría de las economías de Centroamérica y el Caribe el pago electrónico aún no es utilizado. Sin embargo, el número de pagos impositivos ha aumentado de un año al otro, junto con el porcentaje de ingresos que deben de ser tributados.
Asimismo, durante 2013, América del Sur fue la región que más subió las tasas tributarias, y contiene los países que exigen más tiempo para pagarlas. El aumento de impuestos en Argentina en 2013, y la creación de más tipos de impuestos en Colombia en ese mismo período, repercutió en el promedio regional.
Para el ecuatoriano Oswaldo Toscano, docente universitario y doctorando en economía política de la Universidad Swiss Manager Center, los Gobiernos de América Latina han asumido funciones extrafiscales, “lo cual ha llevado a incrementar la recaudación fiscal y los empréstitos que les permitan sostener estas funciones que requieren de altos niveles de gasto”.
Toscano resalta el caso de Perú como el mejor en relación a sus impuestos, con un 36% de tasas impositivas sobre las ganancias netas, 256 horas al año para los trámites y ocho tipos de pagos. El promedio de América Latina es de 55,4% de tasas generales sobre las ganancias, 620 horas en pagos y 23,7 tipos de impuestos.
Pero sumando los datos de este estudio al de Haciendo Negocios (Doing Business), Toscano considera que actualmente el mejor país de América Latina para hacer negocios es Colombia, seguido por Perú, México y Chile.
“Hay que recordar que no solo los impuestos dan forma al ecosistema favorable para la acción empresarial, hay otros aspectos como la facilidad para la apertura de un negocio, el manejo de permisos de construcción, la obtención de electricidad, o el acceso al crédito bancario, que también pesan”.
Tasas impositivas niveladas: clave para el desarrollo económico
El estudio hace énfasis en los delicados límites que deben mantener los Gobiernos a la hora de establecer sus tasas impositivas: asegurar que existan suficientes ingresos públicos que garanticen obras y servicios, mientras que el nivel de las tasas no ahuyente a la inversión: sin las empresas, no hay manera de generar ingresos para el Estado.
Para Toscano un impuesto es un medio que le permite a un Gobierno cumplir con sus obligaciones, por lo que el nivel adecuado de tributación solo debe justificar una misión: proteger los derechos de los ciudadanos.
“Un impuesto responde a una asignación de recursos requerida por el Gobierno. Los impuestos que vayan a cubrir más allá de estas funciones y responsabilidades son recaudaciones extrafiscales”, explicó.
Toscano también ahondó en la manera ideal de realizar esta recaudación: “el impuesto debería estar basado en una alícuota plana para todos. El impuesto progresivo —aquel en el que sube la alícuota según sube el ingreso— genera una alteración en los patrimonios relativos y elimina los incentivos para ser más productivo”, sostuvo.
Editado por Elisa Vásquez