EnglishUn tribunal de Suecia anunció hoy en una audiencia pública que Julian Assange continuará con orden de captura y detención por cargos de abuso sexual y violación. La defensa, que había pedido que se descartase la orden de captura internacional, acudirá al tribunal de apelaciones. El hacker australiano y fundador de WikiLeaks no asistió a la audiencia, ya que continúa refugiado en la embajada de Ecuador en Londres.
Stockholm court says Assange is still suspected for rape and molestation.
— sven (@svengrundberg) July 16, 2014
“La Corte ha decidido que todavía existe una causa probable en relación con las sospechas dirigidas a Julian Assange (apremios ilegales, acoso y violación sexual, incidente menos grave) y que todavía hay un riesgo de que no se presente [a una audiencia] o de que de alguna otra manera evite colaborar en la investigación y en el proceso subsiguiente”, informó la el comunicado de prensa oficial.
#Assange verdict: No change. Status quo remains at least until appeal. http://t.co/6bjBZXxMib More: http://t.co/0Sqa2fneHf
— WikiLeaks (@wikileaks) July 16, 2014
La fiscalía, por su parte, pidió que se mantenga la orden de detención y manifestó que la audiencia se estaba llevando a cabo en Estocolmo porque “no era efectivo” realizarla en Londres, donde se encuentra Assange.
Según el portal web de noticias Falkvinge, que cubría el acontecimiento en directo, la fiscalía indicó que el hacker permanece en la embajada por voluntad propia y que su tiempo allí no puede descontarse en el cálculo final de su tiempo de detención. Alegan asimismo que hay riesgo de fuga en el caso de que se realice una nulidad de la orden de detención.
Después de agotar todas las instancia legales ante las acusaciones de violación y abuso sexual en 2010 en Suecia, Assange pidió asilo en la embajada de Ecuador, donde reside desde junio de 2012.
Luego de las palabras de la fiscalía, la defensa argumentó que al no habérsele tomado declaración en la embajada, se han extendido demasiado los plazos y tal cosa viola su derecho al debido proceso.
Además, la defensa de Assange llamó la atención sobre el punto 5.3 de la Convención Europea de los Derechos Humanos, en el cual se establece la presunción de inocencia, y remarcó también que jamás hubo una declaración por parte de Assange para rehusar asistir a una audiencia.
“Esta investigación está en el mismo estado hoy, en el 2014, que hace cuatro años, en 2010. Esto puede llevar a una o más audiencias. Pero no es una investigación compleja. Después de esta audiencia, ya es el momento para decidir si presentar cargos o no”, alegó la defensa.
De igual manera, los abogados de Assange aseguraron que el asilo político que Ecuador le da a Assange es para evitar que sea extraditado a Suecia, pues este último lo enviaría a Estados Unidos, donde, alega Ecuador, podría ser sometido a violaciones de sus derechos.
“En un extracto de la concesión de asilo de Ecuador… queda claro que Ecuador está protegiendo a Assange de Suecia, el Reino Unido y Australia, y de la persecución en Estados Unidos. Esto no tiene absolutamente nada que ver con el caso en cuestión. La conclusión es que la afirmación de la fiscalía de que solamente Assange tiene la culpa [de que no se haya avanzado con el juicio] es una tontería en términos jurídicos; existen buenas razones enumeradas por Ecuador para su asilo político”, expresó la defensa.
En el caso de que el tribunal acatara el pedido de la defensa, se terminaría con el pedido de captura internacional que recae hoy sobre el australiano según le explico a AFP Camilla Murray, responsable del tribunal.
El hacker australiano sabe que esta audiencia es solo una batalla en una guerra legal más grande que lo obliga a estar encerrado en la embajada ecuatoriana en Londres.
Durante una rueda de prensa en junio, Assange declaró: “Sigo teniendo un problema todavía mayor, que es el del juicio pendiente y la posible orden de extradición a Estados Unidos”.
Julian Assange se hizo famoso por hacer públicos documentos secretos que revelaban desde números de los soldados caídos en Iraq, abusos y torturas generadas durante las guerras en Oriente Medio, hasta la salud mental de la presidenta argentina.