EnglishTodos los medios de transporte público en Argentina deberán llevar, comenzando hoy, la leyenda “Las Islas Malvinas son Argentinas”, según lo impuso una ley publicada este viernes en el Boletín Oficial. La nueva legislación, sancionada en noviembre de 2014, apunta a destacar el reclamo de soberanía que mantiene el Gobierno argentino sobre el archipiélago ubicado en el océano Atlántico Sur, actualmente bajo el dominio de Gran Bretaña.
Con su entrada en vigencia, todos los medios de transporte público que operen dentro y fuera del país deberán exhibir el reclamo por la soberanía de las islas en “un espacio visible y destacado”, aunque aún no se reglamentó la tipografía ni el formato en el que deberá presentarse. Las estaciones de partida, llegada, y escalada de esos medios de transporte también deberán mostrar la leyenda.
La medida alcanza a “al transporte público de pasajeros que se desplaza por calles, avenidas, rutas, autovías, autopistas, al realizado por ferrocarril, al transporte fluvial, lacustre, marítimo y aéreo”, según sostiene la ley, que le asigna a las empresas de transporte el “mantenimiento y resguardo” de los carteles.

¿Nacionalismo o reivindicación por las islas Malvinas?
Daniel Bertti, excombatiente del conflicto armado que se desató por la soberanía de las Islas Malvinas entre Argentina y Gran Bretaña en 1982, y sobreviviente del hundimiento del Crucero General Belgrano, expresó a PanAm Post que le parece “muy buena” la nueva legislación.
“Esto permite mantener presente el anhelo de la mayoría de los argentinos: recuperar las Malvinas. Las Malvinas están usurpadas. Son argentinas”, exhortó.
Para el periodista y autor argentino José Benegas la ley representa un “nacionalismo de eslogan”. Consideró a la medida como “ficción de mala calidad”. “Por mas que el transporte en Argentina lleve esa leyenda, el transporte en en las Islas Malvinas es inglés”, dijo en declaraciones al PanAm Post.
“Primero hay que recuperar las islas de la Historia. Hay que dejarlas en paz. Una cosa es añorar una causa perdida y otra añorarla del modo más imbécil imaginable: con declaraciones pintadas en un bus”, manifestó.
Top Gear y el escándalo en la Patagonia
La cuestión de la soberanía de las islas es un tema recurrente en la agenda política argentina. Cada 2 de abril, aniversario del desembarco de las tropas argentinas en la isla, alcanza su auge y se convierte en un tema predominante en los medios y los discurso políticos. Sin embargo, la filmación en la Patagonia argentino de un episodio del programa especializado en automóviles de la BBC de Gran Bretaña, Top Gear, reavivó las tensiones y el sentimiento nacionalista.
El pasado 27 y 28 de diciembre, la cadena británica transmitió las dos partes de su episodio especial de Navidad filmado en el extremo sur del continente. El rodaje, que se realizó hace tres meses en el sur argentino, se produjo en medio de tensiones en torno a la supuesta alusión a la Guerra de Malvinas de las matrículas de los autos utilizados por la producción del programa.
Tonight on BBC2, some men are nice about Argentina. Tomorrow night, they throw rocks at us.
— Jeremy Clarkson (@JeremyClarkson) December 27, 2014
La polémica surgió a partir de la utilización de un Porsche 928 con la matrícula “H982 FKL”, que algunos consideraron una referencia al año de la guerra (1982) y al nombre que llevan las islas en inglés, Falkland Islands.
Desde la Municipalidad de Ushuaia, capital de la provincia de Tierra del Fuego, donde se desarrolló parte de la filmación, manifestaron “desagrado ante la actitud ‘suspicaz’ y ‘provocativa'”.
“Esta gente solamente ha venido a faltarle el respeto a la memora de nuestros caídos en Malvinas y eso no lo podemos permitir”, consideró un legislador local.
Ademas, un Lotus y un Mustang, dos vehículos en los que viajaban otros miembros de la producción, tenían matrículas con números similares a los soldados argentinos y británicos caídos durante el conflicto armado.
Andy Wilman, productor ejecutivo del programa, aseguro que la serie de matrículas utilizadas no fue una “artimaña” mientras que Clarkson afirmó estar “en shock” cuando se enteró del repudio y apuntó contra el Gobierno provincial.

“Los funcionarios del Gobierno intervinieron diciendo que ya no eran bienvenidos en la ciudad, que nuestra seguridad no estaba garantizada y que teníamos que dejar Argentina inmediatamente”, se defendió Clarkson. “Es evidente que nos habían dado permiso para ir, simplemente para que pudieran sacar provecho político de nosotros al expulsarnos cuando llegáramos”
Para el veterano de guerra Bertti el episodio fue una “provocación inútil, algo fuera de lugar”. “Tal vez esté equivocado, pero no creo que sea la voluntad de la mayoría del pueblo británico. Fue una provocación iniciada como una broma que estuvo muy fuera de lugar”, añadió
La polémica escaló hasta alcanzar los niveles más altos de la diplomacia. La embajadora argentina en Gran Bretaña, Alicia Castro, emitió una queja formal ante las autoridades de la BBC para que transmitieran una disculpa publica.
“Las Directrices Editoriales de la BBC establecen que, cuando trabaja en el extranjero, el personal de la BBC deberá ser claro sobre nuestras intenciones al ingresar a otros países para trabajar’. Además, las Directrices Editoriales establecen la responsabilidad de evitar ofensas injustificables'”, indicó la embajadora argentina.
In all seriousness, I would like to thank the people and government of Chile for their help and support when everything went wrong.
— Jeremy Clarkson (@JeremyClarkson) December 29, 2014
Luego de una manifestación en contra de la grabación del programa en la ciudad Tolhuin, en la provincia de Tierra del Fuego, el equipo de Top Gear fue expulsado de la provincia, agredido por habitantes locales, y terminó buscando refugio en el vecino país de Chile.
Editado por Adam Dubove.