EnglishSebastian Cevallos es socialista, y director adjunto del movimiento Unidad Popular. También es el primer ecuatoriano en ser enviado a prisión por usar su cuenta de Twitter.
El pasado 11 de noviembre, un tribunal de la ciudad de Cuenca sentenció a Cevallos a 15 días en prisión por denunciar en la red social de microblogging a familiares del ministro de Trabajo, Carlos Marx Carrasco, en un supuesto caso de nepotismo.
El tribunal encontró responsable a Cevallos de un delito menor de cuarta clase, incluido en el Código Penal, que criminaliza actos que dañan el honor y el buen nombre de las personas.
La sobrina del ministro, Paula Francisca Rodas Espinoza, demandó al activista tras sentirse aludida por sus comentarios. Sin embargo, Rodas Espinoza admitió que ella ha trabajado para el gubernamental Instituto Nacional de Patrimonio Cultural desde julio de 2008.

Cevallos, que cuenta con 1.458 seguidores en Twitter, declaró a la ONG ecuatoriana Fundamedios que el tribunal citó el artículo 66 de la Constitución, que, irónicamente, hace referencia a los “derechos de libertad”.
“Es ridículo que mencionen ese artículo de la Constitución”, dijo Cevallos, “pues en nombre de la libertad y la libertad de expresión me están sentenciando”.
El artículo 66 le reconoce a los ecuatorianos el derecho a proteger su honor y buen nombre.
El activista social comenta a PanAm Post que ahora está esperando la notificación oficial de la sentencia y confirmó que apelará para solicitar una aclaración y una expansión de los fundamentos del fallo que considera “injusto”.
Cevallos recibió el apoyo de usuarios en las redes sociales, quienes compartieron su imagen con la siguiente frase: “el primer usuario de Twitter en ser sentenciado en Ecuador”. Los mensajes de apoyo y solidaridad con Cevallos se agruparon bajo el hashtag #TuitearNoEsDelito.
Tan pronto se enteró de la decisión, Cevallos tuiteó: “No nos amedrantarán. Continuaremos”.
El juicio comenzó el pasado 19 de octubre, cuando el activista ecuatoriano recibió la notificación. Fue informado que los días 21, 22, y 23 de julio de este año “ha proferido expresiones en franco descrédito y deshonra” contra Rodas Espinoza.
Además, la acusación contra Cevallos afirma que las palabras en esos mensajes era “de forma absolutamente falaz, dolosa y con el profundo ánimo de irrogar daño”. Su respuesta en Twitter fue: “No les tenemos miedo”.
Art19 Declaración de los DD.HH. "Todo individuo tiene derecho de opinión y de expresión; este derecho incluye el no ser molestado… (1)
— Sebastián Cevallos (@sebastcevallos) November 16, 2015
Fundamedios publicó un comunicado de prensa explicando algunos de los tuits controvertidos que publicó. En el primer tuit, afirman desde la ONG, Cevallos convocó a una conferencia de prensa para denunciar “actos de corrupción de un alto funcionario de Alianza País [partido gobernante]”. En el segundo tuit preguntó a sus seguidores si sabían quién era el presidente de la Comisión de Ética del partido gobernante. En el tercero, especificó que Rodas Espinoza era la sobrina de Carrasco y que trabajaba en el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural.
Cevallos dice que la decisión contradice tratados de derechos humanos suscritos por Ecuador. Especialmente, señala, el artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos y el artículo 13 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos”
Cevallos, además, sostiene que el Estado ecuatoriano ha recurrido a todo su poder para enviarlo a la cárcel. El dice que este puede ser el primer paso de un camino sin retorno: “Esto es un precedente nefasto en Ecuador. Buscarán regular las redes sociales”.
Para el activista, todas las opiniones políticas en Twitter serán criminalizadas, y considera que Ecuador es una autocracia, ya que aquellos que ostentan el poder “no quieren escuchar muchas voces, especialmente las voces de la oposición”.
Cevallos insistió en denunciar el nepotismo en el Gobierno, y dice que los familiares de la gente en el poder ocupa cargos sin ningún mérito. Estas personas “no llegaron allí por concurso público, sino porque fueron designados a dedo”.
Cevallos y sus abogados afirmaron que es la primera vez en América Latina que un usuario es sentenciado y enviado a prisión por utilizar Twitter.
“Seguiremos adelante con las denuncias”, afirmaron.
“Hemos decidido que si la corte ratifica la sentencia, entonces deberé pasar tiempo en la cárcel, y será como ganar una medalla de honor”, concluyó Cevallos.