La Policía de Colombia detuvo este miércoles 2 de septiembre a cuatro piezas clave en el tráfico de armas que se pretendían usar en mayo pasado para la frustrada Operación Gedeón, una acción que presuntamente tenía como objetivo sacar del poder al dictador venezolano Nicolás Maduro y a la que el propio régimen chavista habría infiltrado.
Los detenidos son cuatro venezolanos que habrían estado en la organización, logística y operaciones directas: los hermanos Juven José (30 años) y Juvenal Sequea Torres (44 años), ambos militares venezolanos; la exdirectora de la empresa Venoco, Yacsy Álvarez Mirabal (40 años) y Ryder Alexander Russo Márquez (33), uno de los líderes de los grupos de la Resistencia venezolana que mantienen actividades en Colombia.
De acuerdo con información extraoficial obtenida por PanAm Post, los hermanos Sequea y Russo fueron aprehendidos en Bogotá, mientras que Yacsy Álvarez Mirabal, quien era la misteriosa mujer que realizó el envío de las armas a los campamentos, fue detenida en Barranquilla.
En la operación policial se habría recopilado información valiosa para las investigaciones que sigue la Fiscalía colombiana desde el pasado 25 de marzo, cuando incautaron armas cuya propiedad se la atribuyó el exgeneral venezolano Clíver Alcalá Cordones, quien estuvo involucrado en la primera etapa de la planificación de la Operación Gedeón, antes de ser detenido y deportado a Estados Unidos, donde tiene abiertos procesos por narcotráfico.
Fuentes señalan a PanAm Post que en la residencia donde se encontraría Juvenal, también estaban su madre y su hermana. Hasta horas del mediodía seguían las labores dentro del inmueble.
En una investigación publicada por PanAm Post en mayo pasado se precisó que la misteriosa mujer señalada por el envío de armas se trataba de Yacsy Álvarez Mirabal, una ingeniero venezolana graduada en la Universidad Metropolitana, que figuraba como directora de Venoco y quien vivía entre Estados Unidos, España, Colombia y Venezuela.
La mujer, además, según reveló el periodista Orlando Avendaño en una de las principales entregas de la investigación, fue la acompañante de los estadounidenses involucrados en la Operación Gedeón (dos de ellos detenidos en Venezuela el 3 de mayo) en un vuelo privado entre Colombia y EE. UU.
Fuentes consultadas por PanAm Post para este caso han señalado que Álvarez, vinculada al empresario Franklin Durán —que ha sido hasta agente del régimen y que también se encuentra detenido en Venezuela por el mismo caso—, presuntamente tenía acceso a campamentos de entrenamientos de los hombres del comando y se encargaba de algunas labores administrativas.
A finales de mayo pasado la policía política de la dictadura de Maduro detuvo a la madre de Álvarez Mirabal, a quien dejaron en libertad tras someterla a varios interrogatorios.
Los hermanos Juven y Juvenal, que habrían estado involucrados en la segunda etapa de la organización de la Operación Gedeón, tienen en Venezuela a un tercer hermano detenido por este caso, Antonio Sequea Torres, capitán de la Guardia Nacional.
Por esta operación ya hay detenidas más de 100 personas, entre los que destacan los estadounidenses Luke Denman y Airan Berry, a quienes ya les condenaron a 20 años de cárcel en un juicio en el que no pudieron contar con sus abogados privados, como tampoco las más de treinta personas sentenciadas por este caso. Tras las detenciones, sus familiares no han podido visitarlos ni conocer su real estado de salud, condiciones físicas y psicológicas.
Familiares han comentado a PanAm Post que temen que estos hayan podido ser sometidos a presiones, tratos crueles, torturas u ofrecimientos irregulares para que dieran alguna versión determinada sobre lo que ocurrió en la poco clara Operación Gedeón.
Esta fue una acción cívico-militar desarrollada a principios de mayo pasado con el objetivo de deponer a Maduro y restablecer la libertad para Venezuela.
Más de 40 funcionarios, la mayoría muy jóvenes, que desertaron a las fuerzas militares y policiales venezolanas en febrero de 2019 tras el llamado de Juan Guaidó de pasar a Colombia, se comprometieron y entrenaron en campamentos clandestinos para poder participar en esta acción libertaria, la cual, sin embargo, habría sido infiltrada por piezas del régimen de Maduro hasta manipular planes y conocer todos los detalles.
Entre los detenidos hay algunos personajes cercanos a la dictadura, que siempre han fungido como aliados del chavismo y que ahora inexplicablemente estaban involucrados en apoyar esta apuesta armada para derrocar la dictadura chavista.
Aunque los miembros de la Operación Gedeón ingresaron por mar y tierra, fueron emboscados al arribar a Venezuela y detenidos en diversas operaciones. Hasta ahora hay un parte oficial de ocho muertos, no obstante, el régimen solo ha dado los nombres de cuatro.
La dictadura aseguró que hubo enfrentamientos en La Guaira cuando los miembros de la operación ingresaron, sin embargo, investigaciones periodísticas sobre los hechos ponen en entredicho tal versión. Además, hasta ahora no hay ni un solo video oficial que demuestre que fue realmente un enfrentamiento y no una terrible masacre.