English El miércoles, en la ciudad de Nueva York, el Instituto Cato, centro de investigación de tendencia libertaria, otorgó a Leszek Balcerowicz el Premio Milton Friedman por la Promoción de la Libertad 2014. Presentado cada dos años y con un cheque de US$250.000, puede que éste sea el premio más importante del mundo en cuanto a los logros en la promoción de la libertad y de la soberanía individual.

Balcerowicz estuvo al timón de la transición de la planificación central al estilo soviético a una economía más orientada al mercado en Polonia. Durante 1989 y 1991, como viceprimer ministro y ministro de Finanzas de Polonia, puso en marcha un plan de reforma radical que incluyó la liberalización de los precios y la implementación de medidas fiscales y monetarias sólidas.
Al recibir el premio, Balcerowicz señaló que en aquel momento habían dos opciones para implementar las reformas: La manera rápida o la gradual. Y él llegó a la conclusión de que la manera rápida era impredecible, pero la manera gradual no tenía ninguna posibilidad de lograr resultados. Bromeó que lo impredecible era mejor que el fracaso seguro.
En 2012, el Wall Street Journal llamó a Balcerowicz el “anti-Bernanke”:
Cuando cayó el comunismo en Europa, fue pionero en la “terapia de choque” para matar la hiperinflación y construir un mercado libre. A finales de 1990, introdujo un techo a la deuda en la constitución de su país, esposando las manos de los gobiernos futuros que quisiesen gastar demasiado. Cuando fue gobernador del Banco Central desde 2001 hasta 2007, sus políticas para fortalecer la moneda evitaron una burbuja de crédito y su probable pinchazo.
Como resultado del fuerte control de Balcerowicz sobre el gasto público y de políticas monetarias responsables, Polonia fue el único país de la Unión Europea que evitó la recesión de 2009 y ha sido la economía de más rápido crecimiento desde entonces. El acto de reconocimiento de su éxito atrajo a varios cientos de invitados a una cena con Garry Kasparov como orador titular.
El excampeón mundial de ajedrez y activista de la oposición en Rusia expresó su apoyo a los “valores estadounidenses”. Sin embargo, compartió su preocupación por las débiles posturas del presidente estadounidense Barack Obama y el primer ministro británico David Cameron respecto al creciente rango de acción y poder geopolítico de Rusia.
“Si en lugar de Reagan y Thatcher hubiésemos tenido a Obama y Cameron, yo todavía estaría jugando al ajedrez para la URSS”, bromeó Kasparov.
#FriedmanPrize keynote Garry Kasparov jokes he was born in the Deep South, next to Georgia…the country. pic.twitter.com/5gSlETKueU
— CatoEvents (@CatoEvents) May 22, 2014
Balcerowicz también señaló las amenazas actuales a sus reformas y al libre mercado en Europa del Este. Identificó dos oponentes principales: Los que se benefician personalmente del mayor intervencionismo — los compinches del gobierno y beneficiarios del gasto público — y los que lo apoyan por razones ideológicas. En el contexto de la democracia, dijo, “donde hay demanda, hay oferta”, en referencia a los incentivos políticos para satisfacer a estos grupos.
Y dijo que esta es la razón por la que el trabajo de los centros de investigación como el Instituto Cato es tan importante. Se mostró particularmente orgulloso de recibir lo que él y otros consideran como el equivalente al Premio Nobel en el movimiento de la libertad, y describió la experiencia como su más alto honor.
Sin embargo, si uno estudia la trayectoria de Balcerowicz en la década de los 80, no sale con la impresión de que pudiese llegar a recibir un premio por la promoción de políticas de libre mercado que lleva el nombre de un economista de la Escuela de Chicago. Obtuvo su doctorado en la Escuela Central de Planificación y Estadística (CSPS) en Varsovia. De 1978 a 1980 trabajó en el Instituto de Marxismo-Leninismo, y fue miembro del Partido Obrero Unificado de Polonia a partir de 1969.
Balcerowicz había leído el trabajo sobre la importancia de los derechos de propiedad privada y el sistema de precios de Ludwig von Mises y FA Hayek, pero nunca llegó a ninguna posición de liderazgo para implementar esas ideas. No estaba interesado en la política, ya que parecía que la dominación soviética y el gobierno de un solo partido habían llegado para quedarse en Polonia.
Todo eso cambió en 1989. El sindicato de trabajadores de Solidaridad fue legalizado en abril y Tadeusz Mazowiecki, primer líder no comunista de Europa del Este desde el final de la Segunda Guerra Mundial, pidió a Balcerowicz que fuese su viceprimer ministro y ministro de Finanzas. Balcerowicz aceptó e implementó medidas destinadas a equilibrar el presupuesto del Estado y terminar la espiral inflacionaria.
Se enfrentó a una dura oposición y a la disminución de la popularidad: “¡Fuera Balcerowicz!” se convirtió en el lema de muchas manifestaciones izquierdistas y populistas en Polonia. Sin embargo, el economista Steve Hanke ha comparado a Polonia con la vecina Ucrania, que no adoptó reformas de mercado después de la caída de la Unión Soviética, y observó un marcado contraste en términos de PIB. A diferencia de la tasa media anual de crecimiento de Polonia 4,42%, la economía de Ucrania se ha contraído a una tasa real anual de casi un 1% desde 1992.
Balcerowicz ejerció los mismos cargos de nuevo desde 1997 hasta 2000 como líder del partido Unión por la Libertad (UW), y durante los próximos siete años, se desempeñó como presidente del Banco Nacional de Polonia. En 2005, el presidente del país, Aleksander Kwasniewski, le otorgó la más alta condecoración del país, la Orden del Águila Blanca.
“Las contribuciones de Leszek Balcerowicz para el avance de la libertad y el libre mercado en Europa del Este no tienen parangón”, dijo el CEO de Cato, John Allison, al anunciar el premio. “Polonia ahora sirve como un modelo que otros países pueden seguir en la transición del socialismo a una economía respetuosa del ser humano, basada en la responsabilidad individual y el estado de derecho”.
Balcerowicz ha escrito varios libros y trabajos en revistas científicas. Su libro más reciente es Descubriendo la libertad, un best-seller polaco de ensayos de liberalismo clásico.
Fergus Hodgson contribuyó en la redacción de este artículo.