Managua, 23 ene (EFE). – El sector privado de Nicaragua anunció este miércoles que está “listo y preparado” para marchar en las calles de Managua mañana jueves, a favor de una solución pacífica de la crisis, si la Policía extiende el permiso para la manifestación.
Las marchas no oficialistas fueron prohibidas por la Policía Nacional desde el pasado mes de septiembre, cuando amenazó con encarcelar a quienes las promuevan.
No obstante, el Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), la Cámara de Comercio Americana de Nicaragua (Amcham) y Funides solicitaron el lunes un permiso para marchar.
“Si dan el permiso, estamos completamente listos y preparados para marchar (_) con el objetivo de llamar a la solución pacífica de los problemas sociales, para que se vuelvan a reencausar las vías del diálogo nacional”, dijo el director ejecutivo de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides), Juan Sebastián Chamorro, a periodistas.
Aunque continuamos a la espera de la autorización oficial por parte de las autoridades, mantenemos nuestra disposición de marchar de manera pacífica, porque urgimos de una solución a la crisis que nos permita construir la Nicaragua que todos queremos. #SOSNicaragua pic.twitter.com/NaAb2Nb1zV
— COSEP Nicaragua (@COSEPNicaragua) January 23, 2019
Las marchas no oficialistas suelen ser pacíficas, se caracterizan por exigir la renuncia del presidente Daniel Ortega, cuyo Gobierno es acusado por la oposición como responsable de la muerte de cientos de nicaragüenses que han participado en manifestaciones en medio de la crisis sociopolítica que vive Nicaragua.
Diversos sectores de la sociedad nicaragüenses han insistido a Ortega que retorne al diálogo nacional que se inició en mayo pasado, sin éxito.
“Tenemos que pensar en un nuevo país, estamos convocando a esta marcha con el único objeto de hacerle ver al Gobierno que la voz de los nicaragüenses quiere ser escuchada, y que quiere diálogo”, afirmó Chamorro.
El dirigente empresarial y miembro de la opositora Unidad Nacional por la Justicia y la Democracia afirmó que, en caso de que la Policía no brinde una respuesta, podrían tomarlo como un permiso tácito, ya que “cuando las autoridades se quedan calladas es un sí en la administración pública nicaragüense”, aunque no confirmó la marcha.
Desde abril pasado, Nicaragua vive una crisis sociopolítica que ha dejado entre 325 y 561 muertos, y de 340 a 767 detenidos, según organismos humanitarios.
Ortega reconoce 199 muertos y 340 detenidos a los que llama “terroristas”, “golpistas” y “delincuentes comunes”.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha señalado al Gobierno de Ortega como responsable de crímenes “de lesa humanidad”.
La Organización de Estados Americanos (OEA) estudia la aplicación de la Carta Democrática Interamericana a Nicaragua, por ruptura del orden constitucional.
Ortega rechaza responsabilidades en la crisis, así como los señalamientos generalizados sobre graves abusos de las autoridades contra los manifestantes antigubernamentales, y denuncia ser víctima de un intento de “golpe de Estado fallido”.