Represa Itaipú, 26 feb (EFE). – El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, y el brasileño, Jair Bolsonaro, tuvieron este martes su primera reunión bilateral, celebrada en la hidroeléctrica de Itaipú, compartida por ambos países, donde abordaron el futuro de la central, cuyos términos se renegociarán en 2023, y la lucha contra el crimen organizado en la región.
Los dos mandatarios mantuvieron un encuentro a puerta cerrada, de una media hora de duración, antes del acto de toma de posesión del director del lado brasileño de la represa, Joaquim Silva e Luna.
En una breve declaración conjunta, el presidente paraguayo y el brasileño informaron del contenido de esa reunión, que se centró en las futuras negociaciones de Itaipú en 2023, y de la lucha contra el crimen organizado que afecta a la región.
Abdo Benítez urgió a su homólogo a acelerar los pasos previos a la revisión del anexo C del Tratado de Itaipú, relativo al costo de la energía que, por el momento, Paraguay vende a precio de costo a su país vecino.
“Paraguayos y brasileños tenemos por delante un importante desafío (…) la revisión de las bases financieras y prestación de servicios de la entidad, cuyo plazo de negociación es inminente”, dijo el presidente paraguayo.
Añadió que por ello “resulta prioritario agilizar las consultas y estudios técnicos internados necesarios para satisfacer las legítimas aspiraciones de ambos países”.
También aludió a la construcción de dos nuevos puentes internacionales entre los dos países, un acuerdo que ya firmó con el expresidente brasileño Michel Temer.
Por su parte, Bolsonaro quiso “recordar y celebrar a aquellos que fueron responsables” de la represa, con un homenaje a la parte brasileña y también a la paraguaya, con una mención al dictador Alfredo Stroessner (1954-1989), bajo cuyo régimen se edificó la hidroeléctrica.
Paraguay y Brasil tienen pendiente renegociar el Tratado de Itaipú y, en particular, el anexo C de ese documento para decidir qué hará con el 50 % de la energía generada por la presa que le corresponde a Paraguay y cuyos excedentes, hasta ese año, debe venderlos al país vecino a precio de costo.
Itaipú Binacional fue creada el 17 de mayo de 1974, para administrar su construcción y puesta en funcionamiento 10 años después, en 1984.
La declaración conjunta entre Abdo Benítez y Bolsonaro se produjo solo ante los invitados al acto, sin la presencia de prensa, a la que la organización mantuvo en una sala contigua desde la que se retransmitió el acto a través de una pantalla.
Este era el primer encuentro entre los dos jefes de Estado, aunque ya habían coincidido en Brasilia el pasado 1 de enero, durante la toma de mando de Bolsonaro.
No obstante, es la segunda reunión de Abdo Benítez con un presidente brasileño en poco más de dos meses, ya que el 21 de diciembre de 2018 visitó Itaipú, donde firmó con el expresidente Michel Temer un acuerdo para la construcción de dos nuevos puentes que unan ambos países y contribuyan a la integración regional.
Abdo Benítez también tiene pendiente con Bolsonaro revalidar el acuerdo al que llegó con Temer el pasado diciembre sobre la construcción de dos nuevos puentes internacionales entre Paraguay y Brasil que serán financiados por Itaipú.
Los dos Gobiernos también están a la espera de resolver el pedido de Paraguay a Brasil para que revoque el estatus de refugiados políticos a tres activistas de izquierdas, procesados en el país suramericano por el presunto secuestro en 2001 de la nuera del exministro de Hacienda, Enzo Debernardi.