Honduras, Guatemala y El Salvador, países que conforman el Triángulo Norte, han emitido un comunicado en el cuál piden que el trato hacia sus conciudadanos deportados sea “digno y humano”, debido al endurecimiento de las políticas migratorias de Estados Unidos.
La declaración conjunta, que fue publicada por la Cancillería hondureña, expresa que “el personal consular tiene la misión de velar por que los derechos humanos de los connacionales sean respetados en todo momento, garantizando el debido proceso, así como un trato digno y humano”.
El diario estadounidense The Washington Post informó en la temporada navideña que se acercaban redadas masivas de deportación contra miles de familias que habían ingresado ilegalmente a ese país, desde inicios del 2014, y que según este medio podrían ascender a 100.000 familias, aproximadamente.
Respecto a esto, los países firmantes lo confirman, al declarar que están deportando “de manera particular, las unidades familiares, niños y adolescentes que hayan ingresado irregularmente a territorio estadounidense desde 2014, y que cuenten con una orden final de deportación, emitida por un juez”.
La operación que abarca prácticamente todos los estados donde hay cantidades importantes de migrantes, se comienza a sentir en los países centroamericanos, siendo Guatemala y Honduras los primeros países centroamericanos en sentir la ola de deportaciones.
El pasado jueves 7 de enero Guatemala recibió un vuelo con 131 deportados. En relación con este hecho, el canciller guatemalteco, Carlos Raúl Morales, remarcó la oposición del país centroamericano con respecto a las redadas, por considerar que “no es la forma como vamos a lograr tener resultados en el tema de la migración, por el aporte que los migrantes realizan, tanto en el país de origen como en el de destino”.
Mientras tanto, Honduras también recibió el primer grupo de 115 deportados de Estados Unidos, según el Centro de Atención al Migrante Retornado (CAMR).
“Son momentos muy emotivos para las familias, porque muchos de los niños ya asistían a la escuela y a raíz de estas redadas fueron arrancados de lo que ellos consideraban sus hogares para ser retornados”, dijo la primera dama, Ana García.
La vicecanciller hondureña, María Andrea Matamoros, dijo que su país no comparte, aunque “respeta” las medidas adoptadas por Estados Unidos.
Honduras no puede “parar esas redadas” contra migrantes, subrayó la funcionaria, quien señaló que el presidente hondureño ha instruido a los consulados y embajadas en Estados Unidos para que asesoren a compatriotas que lo soliciten.
La Cancillería de Honduras también ha anunció que atenderá a los migrantes las 24 horas de los 7 días de la semana, a través de un centro de llamadas denominado ALHO VOZ.
Según reza el comunicado “la disposición implementada por la Vicecanciller María Andrea Matamoros, tiene como objetivo velar por el respeto de los derechos humanos de cada uno de los hondureños que se encuentran en situación migratoria irregular en esa nación”.
Honduras y El Salvador detienen 25 deportaciones
El Gobierno de Honduras logró detener la deportación de tres familias hondureñas cuya salida desde Estados Unidos era inminente, ya que sus miembros fueron detenidos en redadas de las autoridades migratorias de ese país, informó la vicecanciller, María Andrea Matamoros.
La funcionaria detalló que las familias integradas por tres madres y cuatro niños, ingresaron a Estados Unidos en 2014, tienen procesos legales en curso y, en consecuencia, no pueden ser deportadas, ya que la medida es violatoria de las leyes y de sus derechos humanos individuales.
Por su parte, el Gobierno de El Salvador anunció este jueves que logró suspender la deportación de 22 personas atrapadas en las primeras redadas de 2016, gracias a un esfuerzo que mantendrá por tiempo indefinido.
“Se ha conseguido la suspensión de la deportación de ocho unidades familiares, conformadas por 22 personas, detenidas en los operativos del 2 y 3 de enero”, consignó la cancillería salvadoreña en un comunicado.
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Casi 250.000 deportados en 2015
El Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. reportó que al cierre del año fiscal 2015, fueron deportados 227.038 migrantes irregulares, a los que se sumaron 8.375 retornos “voluntarios” de indocumentados que optaron por volver al país del cual procedían.
El número de deportados descendió significativamente en comparación con 2014, cuando la cifra de expulsados del país norteamericano fue de 315.943 . La mayoría de los deportados han sido mexicanos, casi la mitad, y el resto guatemaltecos, salvadoreños y hondureños, por cantidad en ese orden.
El número de arrestos totales del último año fiscal fue de 337,117, y es el segundo dato más bajo de capturas desde 1972, dijo el secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, en este reporte.