Tras la inesperada victoria de Donald Trump y su llegada a la Casa Blanca el 20 de enero del 2017, los sectores de comercio, servicios y turismo de México preparan una estrategia denominada “shock anti-Trump” con la cual esperan poder responder ante una ruptura comercial con Estados Unidos.
Esto lo ha informado Enrique Solana Sentíes, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio y Turismo (Concanaco) y señaló que se han conformado grupos de trabajo por sector, con el propósito de definir la defensa, estrategia que cuenta con dos planes, de los comerciantes así como del turismo.
“El gobierno federal no está esperando a que llegue el 20 de enero, en realidad estamos trabajando y analizando las condiciones que pueden suceder con las amenazas” dijo Solana quien también anunció que pronto sostendrán una reunión con el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, con quien complementarán grupos de trabajo en los rubros donde hay mayor expectativa.
- Lea más: Integración económica entre México y EE.UU. a todo vapor pese a elección de Trump
- Lea más: Cúpula empresarial de México y EE.UU. se preparan para reformas del TLCAN
“Estamos ideando una campaña con la Secretaría de Economía para promover lo hecho en México. Esto busca concientizar que consumamos lo interno y hacer una economía interna fuerte” dijo Solana quien también puntualizó que estas medidas están siendo trabajadas en conjunto con las Cámaras Nacionales de Comercio.
Por su parte, Ricardo Navarro, tesorero de la Concanaco y expresidente de la Conaco de la Ciudad de México, manifestó: “No será fácil romper el lazo comercial entre México y Estados Unidos, ni mucho menos imponer aranceles de 35 % a las empresas automotrices instaladas en México que exporten autos a ese mercado”.
Respecto a la competitividad de las empresas mexicanas, José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, expresa que “es muy claro que existirán cambios en la relación comercial entre México y Estados Unidos, por lo que es importante que se busque la manera de potencia lo que se consume en el país y que ello esté complementado en generar precios competitivos”.
Fuente: El Economista