La lujosa vida de Iván Valdés, un empleado del Aeropuerto Internacional de Miami de origen cubano de 46 años, quien ostentaba un cargo gerencial en dicha terminal aérea, destapó la cadena fraudes que había en ese aeropuerto. Valdés era propietario de un automóvil marca Porsche 911 valorado en USD $69.000, vestía trajes finos y no tenía reparon en gastar grandes sumas de dinero cuando viajaba alrededor del mundo.
En primera instancia su jefe inmediato sospechó que Valdés estaría financiando su alto nivel de vida por su carrera de cantante ya que en sus años de adolescencia tuvo un grupo musical, pero se descubrió que el trabajador cubano financiaba su lujosa vida por medio de una cadena de fraude que había organizado desde las facilidades que le daba su puesto en el aeropuerto de la ciudad de Miami.
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En el 2010, Valdés estaba encargado de la modernización de la iluminación del mencionado aeropuerto y por dicha asignación se encargó de 20 compras al por mayor de luces LED, de esta manera, el cubano defraudó por más de USD $5 millones por pagos excesivos de las lámparas.
La empresa especializada en iluminación era la Global Electrical & Lighting Supplies en la cual la dirección está a cargo de Rolando Pérez, amigo del acusado a quien a su vez pagaba sobornos. Mientras tanto, la empresa mencionada realizaba compras de lámparas a una segunda compañía de nombre Municipal Lighting Systems, y esta daba cotizaciones con precios alteradas a las empresas que representaban competencia para Global Electrical y así estas no obtenían contratos en las licitaciones que abría el Aeropuerto de Miami.
Según las autoridades, hay evidencias de que la mencionada estafa pudo hacerse pública en el año 2013 sin embargo fue hasta en 2014 cuando la Fiscalía inició la investigación. En documentos policiales se revela que el gerente del Aeropuerto Internacional de Miami, a quien solo se menciona con el nombre de José, ocultó el ilícito luego de que aceptó “una caja llena de dinero en efectivo” que le diera Valdés.
Pero, “José” negó haber recibido dicho pago y declaró que había informado del fraude a “las autoridades pertinentes” sin embargo dijo que no recordaba detalles, pero esto contrasta con que ni la Fiscalía ni la Oficina del Inspector General de Miami-Dade tienen en su poder constancias de denuncias por parte del gerente mencionado. A inicios del presente mes de marzo, Valdés comenzó a purgar una condena de siete años de prisión por fraude.
Fuente: Cibercuba