La violencia en México en 2016 tuvo un costo que equivaldría al 18 % de su Producto Interno Bruto (PIB), ya que en dicho año la violencia en el país azteca incrementó según reportó el Índice de Paz México 2017.
El costo antes mencionado, equivale a que cada mexicano pagara 25 mil pesos (USD $1.250) para mantenerse seguros según detalló Patricia de Obeso, coordinadora del centro de investigación del Instituto de Economía y Paz en México.
Esto es “un impuesto a la seguridad en el país” que es financiado por todos los ciudadanos y lo que a su vez supera a los ingresos mensuales de un trabajador mexicano promedio especialmente en entidades como Colima en donde el costo de la violencia por persona es de 66.500 pesos (USD $3.325) o en Guerrero en donde dicho costo es de 53.600 pesos (USD $2.680).
Para obtener estos datos, son tomados en cuenta los costos directos empleados para contener la violencia en México, como por ejemplo lo que gasta el Estado en las fuerzas armadas, así como los indirectos que como ejemplo es el costo que supone a una familia al quedarse si su sostén.
Con esta información, hay que tener en cuenta “si la inversión que hemos hecho en los últimos diez años en el combate directo al narcotráfico, en contención de la violencia, realmente ha tenido un impacto” o si la pregunta sería “¿en qué deberíamos estar invirtiendo para mejorar los niveles de paz?” indicó De Obeso.
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Según con la institución mencionada, los niveles de paz en México cayeron en 2016 un 4,3 %, mientras que en años anteriores se observó “un estancamiento” en el que no había ni avance pero tampoco retroceso, pero “el deterioro habría sido mayor de no haber sido por las leves mejoras en los niveles de delitos con violencia y por el avance en la implementación del sistema de justicia” indicó la coordinadora del centro de investigación.
Dentro de las cifras que destacan se encuentra el incremento en la tasa de homicidios que es de 18 %, lo que “arrastra los niveles de paz de México hacia abajo” indica De Obeso.
Pero a pesar de el escenario, los niveles de paz del país azteca mejoraron casi un 14 % en comparación a los que se reportaron en 2011 cuando el Instituto de Economía y Paz ubica “el punto álgido de la violencia en México”.
Según dicho informe, el 60 % de los homicidios que se perpetraron en el país azteca fueron con arma de fuego, punto que destaca ya que “el tema de las armas de fuego llama al mercado negro de armas que hay principalmente con Estados Unidos” indica De Obeso.
Según la coordinadora “aún hay mucho que hacer” para que los mexicanos puedan ver la Justicia como una institución confiable así como para eficientar el trabajo de las fuerzas del orden, pero esto comenzará cuando se “volteee a ver a nivel local” para ver como pueden operar las policías, las fiscalías estatales así como los ministerios públicos “que realmente tienen un impacto en la percepción de la ciudadanía en la confianza de las instituciones” destacó la investigadora.
Fuente: Milenio