Guatemala atraviesa una crisis de seguridad debido a las operaciones de extorsión que están llevando a cabo las pandillas, que en recientes días se han enfocado en emprender una ofensiva en contra de las empresas telefónicas Movistar y Telefónica.
Durante la semana pasada trabajadores de Telefónica fueron víctimas de cinco ataques sincronizados, lo cual mantiene preocupada a la compañía, que califica de “alarmante” lo que sucede en Guatemala.
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A pesar de que Telefónica tiene operaciones en 121 países alrededor del mundo, la situación que se vive en Guatemala ha preocupado a sus más altos mandos gerenciales, tanto que su presidente internacional, José María Álvarez-Pallete, visitó el país centroamericano el pasado fin de semana para dirigir las acciones de contingencia que se llevarán a cabo.
Los ataques perpetrados contra los colaboradores de esta transnacional dejaron el saldo de cuatro trabajadores muertos, por lo que los directivos decidieron suspender operaciones, las cuales fueron reanudadas hasta este lunes 13 de noviembre.
Mario Torres, director de comunicaciones interinstitucionales de Telefónica para Centroamérica dijo a medios locales:
“Nunca habíamos tenido un ataque coordinado en cinco lugares distintos en un mismo día tratando de hacer una cosa como esta. Eso muy complicado que cuatro personas mueran en un mismo hecho y quedan varias heridas. Por supuesto, en el mundo nunca lo habíamos tenido”.
Para poder volver a las operaciones de una manera relativamente normal, Telefónica incrementó su seguridad privada con el apoyo de la Policía Nacional Civil, ya que las amenazas siguen vigentes en cuanto al pago de extorsiones a las pandillas.
Los pagos que son exigidos a la compañía de telefonía consisten en uno inicial de USD $13.000 y luego USD $260 a la semana por cada uno de los 20 automóviles que operan en las zonas rojas de la capital guatemalteca, solo así aseguran que los ataques cesarán.
Aunque es sabido que muchas grandes empresas están siendo víctimas de extorsiones en Guatemala, Telefónica es la primera en hablar abiertamente del tema y de exigir que el delito de extorción y asesinato de cuatro de sus colaboradores no quede impune.
Ante esta situación, el subsecretario de Seguridad, Ricardo Guzmán, indicó que ya hay avances en las investigaciones, sin embargo, no se pueden brindar más detalles por “seguridad” y aseguró que tanto el caso de la empresa multinacional como los de pequeños empresarios que han sido igualmente extorsionados se atenderán por igual.
Fuentes: Prensa Libre, Prensa Libre