La migración de balseros cubanos a territorio estadounidense se ha visto disminuida desde que el expresidente Barack Obama derogara la política “Pies secos, pies mojados“, que permitía a los originarios de Cuba obtener un estatus migratorio regular al llegar a suelo estadounidense por mar o por tierra.
La cifra de balseros interceptados ha reportado una reducción significativa.Cifras oficiales revelan que entre octubre de 2016 y agosto de 2017 fueron 1.468 los cubanos capturados en alta mar según la Guardia Costera de Estados Unidos.
En contraste, durante el año fiscal de 2016 fueron interceptados 5.396 balseros.
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A pesar de que esta ley que normalizaba el estatus migratorio de los cubanos había sido establecida por el expresidente Bill Clinton, el flujo migratorio de cubanos se incrementó a finales de 2014, cuando las relaciones entre Cuba y el país norteamericano comenzaron a normalizarse, y a la vez la represión del régimen castrista recrudeció.
Signo de esto es que el flujo de migrantes cubanos pasó de ser de menos de 8.000 en el año fiscal 2011 a más de 44.000 en 10 meses del periodo fiscal 2016, según cifras oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Pese a la derogación del beneficio migratorio, muchos cubanos sin duda se han arriesgado a intentar ingresar a territorio estadounidense por la vía marítima. Sin embargo, en caso de que logren arribar a tierra firme, ahora son deportados a Cuba.
Más de 15.000 cubanos son declarados “inadmisibles” a Estados Unidos
Y es que Estados Unidos es cada vez un destino de refugio más difícil para los cubanos como lo reflejan las cifras del Departamento de Aduanas y Protección Fronteriza que detallan que en el año fiscal 2017, 15.135 cubanos fueron declarados “inadmisibles” en el país norteamericano.
Estos inmigrantes del país caribeño intentaron ingresar por fronteras terrestres, siendo la más concurrida la de Laredo, Texas, donde 14.037 cubanos fueron rechazados, mientras que otros 588 solicitaron la entrada por San Diego, 343 por El Paso y 167 por Tucson.
Al igual que las cifras de los balseros, las de los inmigrantes que intentan ingresar por fronteras terrestres también han disminuido respecto a 2015 y 2016, cuando se registraron 28.642 y 41.523 cubanos, respectivamente.