Biden entró en una estrategia de redirección discursiva: trasladarse hacia el «moderado centro» y condenar a Trump por el «extremismo conservador». Según el exvicepresidente, y actual candidato presidencial por el Partido Demócrata, es Trump el que «llama para desfinanciar a la policía» y es él quien quiere aumentar el presupuesto de la institución por USD $300 millones.
Según Biden, las acusaciones del presidente Trump hacia su persona es un problema de mentiras patológicas, «la única persona que llama para retirar los fondos a la policía es Donald Trump. Mire su presupuesto. Pide recortar los fondos policiales para la ayuda local, estatal y local por 400 millones de dólares. Una vez más, es patológico», espetó el candidato presidencial por el Partido Demócrata.
"I’m the one calling for $300M more for local police, for community policing … The only person calling to defund the police is Donald Trump. Look at his budget. He calls for cutting police funding for local — state and local help by $400 million. Once again, he’s pathological.”
— Tom Elliott (@tomselliott) September 8, 2020
Pero hay cosas que el candidato demócrata no puede negar, y una es que, durante el mes de julio, cuando se le preguntó sobre si creía necesario redirigir fondos de los departamentos de la policía, Biden respondió con un tajante y contundente «absolutamente sí».
Biden no ha dicho que está de acuerdo con la desfinanciación policial directamente, pero miembros del partido al que pertenece sí lo han estado y él mismo, mediante su campaña, se ha solidarizado con las preocupaciones de los líderes del lema «Defund the police». Que ha sido promovida, principalmente, por el movimiento Black Lives Matter y otros grupos de extrema izquierda en el país americano.
Durante el mes de julio, desde la campaña de Biden, en la voz de Andrew Bates, negaron que el candidato apoya el desfinanciamiento de los departamentos policiales o los recortes de fondos, pero señalaron que el demócrata «escucha y comparte la profunda pena y frustración de aquellos que piden un cambio, y está determinado a asegurar que se haga justicia y que pongamos fin a este terrible dolor».
Bates explicó que Biden apoya la «urgente necesidad de reforma» y con ello una mayor redirección de los fondos policiales a las escuelas públicas, programas de tratamiento de salud mental y de abuso de drogas, y programas de verano.
Eso fue en julio, pero en agosto y septiembre, la retórica del Partido Demócrata cambió, curiosamente a raíz de que las encuestas empezaran a jugarla en contra.
Biden dice que Trump quiere «desfinanciar a la policía», como los demócratas en Seattle
Antes de las declaraciones de Biden acusando al presidente Donald Trump de querer desfinanciar a la policía, ya se había excusado en agosto explicando que él lo que quería en realidad era aumentar y conseguir fondos policiales y no desfinanciarlos.
«Yo quiero conseguir más dinero para la policía para poder hacer frente a las cosas que ellos necesitan, desde asegurar que tengan acceso a la vigilancia de la comunidad, a que tengan en los departamentos a trabajadores sociales, psicólogos, personas que de hecho pueden manejar esos horribles problemas que un policía tiene que tener cuatro grados para manejar», dijo el exvicepresidente del Gobierno de Obama.
Pero el candidato presidencial se ha olvidado, al parecer, de lo que han hecho miembros de su partido. Como Lorena González, presidente del Concejo Municipal de Seattle, institución que aprobó un recorte del presupuesto al departamento de la policía. Esta decisión del concejo provocó que la jefa de policía de Seattle, Carmen Best, anunciara su jubilación.
El recorte del presupuesto aprobado por este concejo provocó despidos y también reducción del salario de varios funcionarios de la policía. Dicha acción, provocó que la ciudad sucumbiera ante el incremento de la violencia en las protestas que ya venían siendo bastante dañinas.
Como se lee en el medio The Epoch Times, todos los miembros del Concejo de la ciudad de Seattle son demócratas, excepto Kshama Sawant, que es miembro del partido Alternativa Socialista. Al principio, la idea era armar un plan para recortar un 50 % del presupuesto, pero como la cifra era un exabrupto y fue tremendamente criticada, decidieron recortar USD $4 millones ahora, luego la cifra de aquí a un año llegaría a los USD $11 millones de reajuste.
En Minneapolis, ocurrió algo incluso más radical, el Concejo anunció que el departamento de la ciudad sería desmantelado y reconstruido. Esa misma semana, los demócratas en el Congreso impulsaron un paquete de leyes para terminar con la «violencia policial y la discriminación racial».
El Concejo de New York, controlado por los demócratas, no se quedó atrás, y también propuso reducir el financiamiento de la policía con un gran recorte de mil millones de dólares.
Todas estas acciones, por ejemplo, fueron fuertemente criticadas por Trump que firmó una orden ejecutiva para reformar la policía (criticada por los demócratas por «insuficiente») y días atrás firmó un memorando para evaluar la financiación federal a las ciudades que han sido «tomadas por los anarquistas» debido a la poca fortaleza de sus administraciones que han contribuido para que la anarquía se imponga.
El documento señala que los gobiernos de estas ciudades han «contribuido a la violencia y destrucción en sus jurisdicciones al no hacer cumplir la ley, debilitando y desfinanciando significativamente a sus departamentos de policía y negándose a aceptar ofertas de ayuda para que se cumpla la ley federal».
Esta postura ejecutiva es una acción directa contra los movimientos que piden por desfinanciar a la policía, y también pone en jaque a los gobiernos internos en Estados Unidos que coquetean con estas ideas constantemente criticadas con mucha severidad por Trump.
Biden y los demócratas nunca criticaron al desfinanciamiento policial con contundencia
Biden, nunca ha criticado con severidad al Defund the police, todo lo contrario, ha elegido esquivar las acusaciones que dicen que lo apoya por su postura ambigua.
Los medios afines a los demócratas, como CNN, de hecho, han tenido que hacer «análisis» sobre los fuertes cuestionamientos que ha recibido el candidato presidencial por parte de Trump debido a sus posturas políticas y planteamientos. En ese sentido, a Trump se le está achacando el papel de ser un extremo radical que ha fomentado la violencia a raíz de la polarización.
Este argumento puede calar para aquellos que no conocen el contexto americano, pues la retórica de Trump siempre ha sido cuestionada por el poco tacto para decir las cosas tenga o no la razón.
Pero en EEUU quiénes han apoyado los alzamientos radicales de izquierda como Antifa o BLM han sido los demócratas, y los que están promoviendo ideas extremas como abolir o desfinanciar la policía son justamente estos grupos que han encontrado en el partido que representa a Biden un aliado circunstancial de mucho poder.
Así que las declaraciones de Biden, por más que se repitan en estos próximos meses de campaña presidencial, carecen de sentido y veracidad porque parecen del mundo del revés. Los facts indican que, los republicanos, encabezados por Trump, han sido los que apelan por fortalecer las instituciones policiales mediante hacer valer el lema Ley y orden. Los demócratas, por contrario, se han vistos cercanos a las ideas de reformar y redirigir los presupuestos de los departamentos de la policía, lo que puede ser un primer paso para desfinanciarlos para luego pasar a abolirlos.