La propuesta de eliminar tres ceros a la moneda en Colombia ya se encuentra en el Congreso de la República con el fin de convertirse en Ley para su implementación. Hay sectores que aprueban la medida mientras otros se oponen a la idea de “simplificar” las transacciones económicas en el país.
El Gobierno de Juan Manuel Santos, principalmente en cabeza del ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, han emprendido una cruzada para que la iniciativa sea una realidad. Sin embargo, gremios como Asobancaria han hecho reparos a este proyecto de eliminar los tres ceros de los billetes. Al mismo tiempo, han propuesto que la iniciativa sea descartada en el Congreso y se ultime el recambio de la nueva familia de billetes.
Por su parte, el ministro de Hacienda calificó como un proyecto que estaba en mora con el país. Cabe recordar que desde el año 2000, en Colombia se ha buscado hacer efectiva la eliminación de los ceros al peso colombiano.
El Banco de la República calculó que la reimpresión de los billetes tendría un costo de USD $146,3 millones ($ 400.000 millones COP).
Propuesta del Fiscal para golpear las economías ilegales
El fiscal General de la Nación, Néstor Humberto Martínez, defendió esta propuesta como una forma de que pierdan valor las “caletas” y los dineros ilegales que están en poder del narcotráfico y corruptos.
Martínez hizo una radiografía de cómo la liquidez monetaria es una forma de atesoramiento de los patrimonios ilegales en cualquier modalidad, por ello, considera que una forma eficaz para combatirla en este momento sería el cambio del peso.
“No más en el llamado ‘narcojet’ llegaron 200.000 euros que ya debieron monetizarse a pesos. Encontramos 1.000 millones de pesos en la casa de uno de esos narcotraficantes que ya debieron monetizarse a pesos (…). Si no pueden cambiarlos por los nuevos pesos perderían poder liberatorio. Eso lo va a tener que hacer ese país tarde o temprano y propongo que generemos el consenso sobre la materia”, dijo.
¿Cuáles son las implicaciones de eliminar los tres ceros a la moneda?
PanAm Post habló con expertos sobre la medida económica, quienes aseguran que es positiva pero que debe tramitarse con cautela.
El economista Luis Alberto Rodríguez indicó que el proyecto de Ley es interesante y recoge varios objetivos, entre ellos, la simplificación en las transacciones y lucha contra la economía ilegal.
“En general, a mediano plazo sus beneficios serían mayores a sus costos. No obstante, para lograr impactos en el segundo objetivo no es suficiente con la eliminación de los tres ceros”.
Manifestó que se deben buscar instrumentos complementarios como sacar de circulación el billete de más alta denominación, que actualmente es el de $ 100 mil COP (USD $36,60), limitar las compras de bienes como apartamentos y casas en efectivo y repensar las barreras al sistema financiero como el 4 por mil.
Agregó que de aprobarse el proyecto de ley es necesaria una campaña de educación financiera y pedagogía del cambio. “Los países que han adoptado medidas como estas lo han hecho por presiones inflacionarias que se salen del control, como Venezuela o Argentina en otros periodos. Pese a esto, ese no es el caso colombiano”.
En opinión de Andres Moreno, consultor en Gestión de Riesgos, es más práctico y económico manejar menos cifras, retroceder las cuentas varias décadas.
“Es un momento ideal por la baja inflación que presenta Colombia, lo cual permite la baja especulación de precios ante estos cambios. Es decir, 10 pesos se vuelven 1 centavo. El peso dólar pasaría de 2.700 pesos a 2 pesos con 70 centavos, mucho más fácil de manejar”.
Fue enfático al señalar que actualmente ningún producto vale menos de 10 pesos, salvo algunas acciones que deberán hacer split para ajustar.
“Facilita el intercambio, la contabilidad, el manejo del dinero y simplifica los billetes. Es un ejercicio que vale la pena y es transparente frente al valor del dinero, la capacidad adquisitiva y frente a la inflación”, dijo.
Criticas al proyecto de Ley
Asobancaria, gremio representativo del sector financiero, a través de un documento concluye que no es un buen momento para llevar a cabo la medida.
“El país se encuentra inmerso en el proceso de implementación de una nueva familia de billetes desde hace un trienio, con un nivel de ejecución aún inferior al 30% y en plena coexistencia con la antigua familia de billetes. Así mismo, resulta muy difícil hacer compatible un periodo de transición muy corto, como el que se requeriría para confiscar los dineros ilícitos, con el tiempo necesario para que la eliminación de los tres ceros tenga la suficiente difusión pedagógica, operativa y tecnológica para evitar traumatismos en la economía”,
La banca, afirmó, después de un análisis riguroso en materia de costo/beneficio que la propuesta de eliminar los tres ceros resulta ser poco eficiente -y costosa-, tanto por los desafíos operativos como culturales que incorpora.
El gremio finalizó señalando que la mejor opción seria profundizar y acelerar en el corto plazo el proceso que viene dándose desde 2015 respecto a la implementación de la nueva familia de billetes: “el sector bancario está dispuesto a apoyar esta alternativa”.