Según un informe presentado por la Misión de Observación Electoral (MOE), el excandidato de izquierda Gustavo Petro, fue quién más generó “una comunidad de intolerancia y miedo entre sus defensores y detractores” en redes sociales de cara a las elecciones presidenciales.
El informe presentado por la MOE analizó los discursos y mensajes que mayor impacto generaron durante las elecciones de Congreso y las dos vueltas presidenciales llevadas a cabo en el primer semestre de este año.
La entidad, que hace veeduría a los procesos electorales en el país, analizó un grueso de 44’871.873 mensajes compartidos a través de Facebook, Twitter, Youtube, Instagram y blogs, y se encontró que cerca de un 10% del total de comentarios estuvieron cargados de violencia, agresividad e intolerancia.
Tendencia que se intensificó durante la primera vuelta presidencial en la que se presentó mayor número de mensajes con contenido irrespetuoso o que incitaba a la violencia.
“Mientras que los principales argumentos durante la campaña de Congreso y consultas populares interpartidistas fueron el odio contra las Farc (34%), la corrupción (26%) y el castrochavismo (24%); en primera vuelta los principales temas cambiaron desde un punto de vista ideológico a: paramilitarismo (34%), corrupción 29% y las Farc 25%”, se lee en una de las conclusiones del organismo.
Respecto al presidente electo, Iván Duque, el informe explica que si bien no se encontró mensajes directos que transgredieran a otros candidatos, muchos de sus electores sí usaron un tipo de lenguaje intolerante.
“No se encontró ningún mensaje de ataque directo a su competencia política”, se destaca. Sin embargo, “sí se encontró con una comunidad muy importante de seguidores y detractores que usaron un discurso de violencia”.
Asimismo, la MOE explicó que el pacto que firmaron los candidatos presidenciales alivianó la atmósfera política entre los electores y sus candidatos durante la primera vuelta, razón por la cual se enriqueció el debate público y disminuyó el registro de comentarios agresivos en redes sociales.
En segunda vuelta, vuelven a cambiar los principales argumentos siendo “Venezuela (33%) la mayor fuente de intolerancia, las Farc (27%) y la corrupción con 22%”, explica la MOE.
Por ultimo, el informe destaca que las noticias falsas influyeron en las elecciones democráticas del país, pues muchas de las veces los lectores se enfrentaban a hechos falsos que eran presentados como reales con una duración de entre “tres y siete días, dependiendo de la influencia de quien desmiente la noticia”.
“Prevalece entonces la función propagandística sobre la informativa, propiciando un clima para la posverdad”, agrega.
Del mismo modo, la candidatura a la presidencia del exfarc Rodrigo Londoño Timochenko, las elecciones a Congreso, las consultas interpartidistas, los debates presidenciales de primera y segunda vuelta y las denuncias de fraude electoral fueron hechos que marcaron a favor y en contra la agenda democrática en Colombia.
“Petro promovió el odio de clases durante la campaña”
La internacionalista Lucia Fillipo le dijo a PanAm Post que haciendo la salvedad de no generalizar, muchos seguidores de Gustavo Petro (petristas) argumentaban que la democracia era el bien más preciado para una sociedad, pero al mismo tiempo se “enfurecían y acaloraban” cuando alguien pensaba distinto a ellos.
“Decían que esa persona no pensaba por fuera de su metro cuadrado o que sencillamente estaba moralmente mal pensar distinto a ellos (petristas). !Qué demócratas!”
Agregó que el odio de clases que promovía Petro en la campaña se vio reflejado en su máxima expresión cuando perdió las elecciones a la presidencia.
“Ese discurso completamente incendiario supuestamente en contra del establishment, parecía más en contra del país entero. El estudio de la MOE desvirtúa el argumento de que ésta está politizada, muchos argumentaban que tenia una tendencia hacia la izquierda, pero hoy vimos que no es así. Una gran noticia para la democracia”, puntualizó.
Petrismo acusó a Uribe del regreso de las FARC al monte
Por otro lado, dos de los sectores políticos que mayor confrontación lograron durante las elecciones pasadas siguen interpelados. Desde un sector petrista se empezaron a escuchar ecos de rechazo que acusaban al uribismo de haber impuesto trabas a la implementación del Acuerdo de Paz, precisamente por la no posesión en el Congreso del líder exfarc, Iván Márquez.
El senador electo Gustavo Bolívar de la bancada de Decentes, liderada por Petro, acusó al expresidente y senador Álvaro Uribe Vélez del regreso de las FARC al monte. Parafraseando lo dicho por Petro al considerar que la guerra “es su zona de confort”, y que esto se traduce en votos para el uribismo.
“Mensaje de Iván Márquez al mundo no aceptando curul es claro…Colombia no cumplió el Acuerdo de Paz. Las bases de las FARC regresan al monte por culpa de Uribe, porque la guerra es su zona de confort, le da votos”, dijo a través de su cuenta en Twitter.
Cabe destacar que Bolivar anteriormente se desempeñaba como libretista de novelas que reflejaban la narcocultura colombiana. Durante su candidatura señalaba que su “sueño” era llegar al Senado para enviar a la cárcel a Uribe.