A la polémica sobre la reunión a motus propio del excongresista Everth Bustamante con delegados de la guerrilla del ELN en Cuba, se suma la de la excongresista de izquierda Piedad Córdoba, quien habría hecho lo mismo.
Córdoba se habría reunido con los jefes guerrilleros en diciembre pasado en la isla, al parecer sin la autorización del Gobierno del presidente Iván Duque.
En este sentido, buscó al expresidente Álvaro Uribe para conversar sobre el tema en el que él le hizo saber cuáles eran las condiciones para adelantar cualquier tipo de conversación:
- Cese de actividades criminales.
- Concertación.
- Si para la concertación tenían desconfianza del Estado, podrían pedirle al Gobierno que hubiese garantes internacionales.
Uribe le habría advertido que a través de su figura era imposible obtener el visto bueno del Gobierno de Iván Duque para llevar a cabo la reunión.
En su cuenta de Twitter, Uribe calificó el encuentro como una conversación constructiva y decente. Y a renglón seguido, afirmó que no sostiene “reuniones clandestinas”.
Mi reunión con la dra Piedad Cordoba condujo a una conversación constructiva y decente. Por qué no hacerla! No tengo reuniones clandestinas
— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) February 4, 2019
Según RCN Radio, la oficina del Alto Comisionado para la Paz confirmó que la exsenadora Córdoba no tenía autorización oficial para realizar esos acercamientos con el ELN.
En su defensa, dijo a la W Radio que su visita a Cuba se debió a una visita medica por problemas de salud y que su relación con el expresidente Uribe siempre ha sido buena.
“Álvaro Uribe y yo tenemos muchas diferencias, pero eso no significa que no podemos hablar de temas que tengan relación con el país”, dijo.
La presunta visita de Córdoba y Bustamante a Cuba pone en aprietos al Gobierno Duque, pues pone en entre dicho el hecho que nunca se hayan sentado a dialogar con los jefes del ELN luego de terminado el mandato del expresidente Juan Manuel Santos.
Las puertas del diálogo de paz fueron cerradas luego del ataque terrorista del ELN a la Escuela de Cadetes de la policía en el que murieron 21 civiles. El Gobierno se mantiene firme y pide la captura de los jefes guerrilleros en la isla y al mismo tiempo pide desconocer el protocolo firmado entre delegados del anterior gobierno y ELN.
Lo había intentado con FARC
Piedad Córdoba, quien ha sido acusada de tener nexos en el pasado con la guerrilla de las FARC, en 2011 también habría pedido ser negociadora de paz con el fin de liberar secuestrados en manos de la guerrilla por esa fecha. Sin embargo, nunca fue nombrada.
La dirigente política es señalada por el material probatorio recaudado de los computadores del abatido jefe guerrillero Luis Edgar Devia Silva, alias “Raúl Reyes”, en medio de la operación Fénix en 2008. En esos computadores se hacia una referencia de la exsenadora como “Teodora Bolívar”.
Sin embargo, ella ha señalado que nunca ha tenido nexos con las FARC, “Yo no soy Teodora Bolívar. Si hubiera estado en las FARC lo hubiera reconocido de cara al país. ¡Jamás pudiera yo prestarme para manipular pruebas! Eso no sale sino de su cabeza”, le respondió al exprocurador Alejandro Ordóñez en un foro en febrero de 2018.