La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) a través de su Sección de Apelación rechazó las solicitudes de nulidad presentadas en la audiencia de sometimiento del excomandante del Ejército Nacional, general (r) Mario Montoya Uribe en octubre de 2018.
Conforme al Auto 131 de 2019, la Sección estableció la permanencia de Montoya en esa jurisdicción en el caso 003 relacionado con las ejecuciones extrajudiciales de civiles para presentarlas como bajas en combate que se registraron en diferentes regiones del país.
De esta manera, el expediente contra el general en retiro pasará a la Sala de Reconocimiento de la JEP para que siga con el trámite establecido y se reconozcan a las víctimas dentro del proceso.
“Tampoco se accedió a revocar la remisión del expediente donde reposan algunas investigaciones de la justicia ordinaria por violaciones a los derechos humanos e infracciones al DIH presuntamente cometidas por el general (r) Montoya Uribe”, precisa la decisión.
La Sección de Apelación no recogió las peticiones que fueron presentadas por los representantes de las víctimas que solicitaban que se anulara toda la actuación de sometimiento del excomandante del Ejército alegando la violación de los derechos de las víctimas a la participación y acreditación.
Y asímismo, recordó que la intervención a las víctimas en la JEP es proporcional. Esto quiere decir que el reconocimiento de las víctimas continuará en la JEP en otras etapas procesales.
“La Sección de Apelaciones negó todas las peticiones de los abogados y consideró en primer lugar, que la intervención a las víctimas en la JEP es proporcional. La Sección recordó, tal y como lo ha establecido la Corte Constitucional, que la actuación masiva de las víctimas podría obstruir el desenvolvimiento de una jurisdicción estrictamente temporal como es la JEP”, se lee en un comunicado.
En septiembre del año pasado, en la audiencia de sometimiento de Montoya a la JEP, los afectados se salieron de la audiencia luego de que el general no reconociera a las víctimas de las ejecuciones extrajudiciales de las ciudad de Soacha y Bogotá. Sin embargo, la Sala de Definiciones Jurídicas aceptó el sometimiento del general y pidió el traslado de su proceso.
¿Cuáles serían los beneficios para el general (R) Mario Montoya?
Hasta ahora el general (r) Montoya es el uniformado de más alto rango del Ejército colombiano que se ha sometido a la Jurisdicción Especial para la Paz luego de haber suscrito un acta para contar la verdad.
Se le acusa por el delito de ejecuciones extrajudiciales cometidos por el Ejército entre los años 2007 y 2008. Además, también es acusado por la Operación Orión en el año 2002, realizada en la comuna 13 de la ciudad de Medellín que se desarrolló bajo su comandancia y en la que se documentaron 75 homicidios fuera de combate, 100 desaparecidos y 450 detenciones ilegales.
A través de su apoderado, negó haber tenido participación y conocimiento en la práctica de los llamados “falsos positivos”. Cabe destacar que estas acusaciones se dieron bajo su mando como Comandante del Ejército, subalterno del ministro de Defensa de ese entonces del expresidente Juan Manuel Santos.
En el caso de que el general colabore efectivamente con esa justicia, cuente la verdad de dichas ejecuciones y repare a las víctimas, podría acceder a los beneficios contemplados en la JEP. Claro está, la sanción dependerá del grado de verdad y de reparación que manifieste en el juicio.
Dentro de las sanciones está la restricción de la libertad de tres o cinco años, en el caso de aceptar su responsabilidad de manera temprana, y en el caso de no colaborar en el proceso y de ser vencido en juicio, la prisión ordinaria sería de hasta 20 años.