Cada vez se conocen más detalles de cómo se fraguó el ingreso de dineros ilícitos de Odebrecht a la campaña de reelección presidencial de Juan Manuel Santos en 2014.
La explosiva declaración ofrecida por el empresario Andrés Sanmiguel Castaño el 18 de junio de 2018, representante de Gistic Logistic Soluciones Integrales, dejó claro que la campaña reeleccionista de Santos necesitaba más dinero para quedarse con la presidencia, luego de perder la primera vuelta frente al uribista del Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga, por un margen de 458 000 votos.
Otra vez los liberales aparecen nombrados
Como había señalado anteriormente PanAm Post con base en las declaraciones de Sanmiguel, se pudo establecer que los liberales tuvieron mucho que ver en la negociación de los sobornos de Odebrecht que llegaron a parar en la campaña de Santos. Lo particular del caso, según conoció el diario El Colombiano, fue que la campaña política para la segunda vuelta fue puesta en manos del hoy jefe del Partido Liberal, César Gaviria. Dicha propuesta había sido impulsada por el exfiscal general Néstor Humberto Martínez, que se desempeñaba en ese entonces como asesor jurídico de su propia firma, Neira Abogados.
Santos, con la presidencia en el bolsillo, nombró a Martínez como ministro de la Presidencia, cargo que fue bastante criticado y que entre sus funciones estaba coordinar y supervisar la gestión de los ministros y del Gobierno. Antes de ser reelegido dicho cargo no existía, y ante tantas atribuciones que le fueron otorgadas a Martínez, se le llamó “el superministerio”. Sin embargo, para junio 2015, Martínez presentó su carta de renuncia al ministerio y un año después fue nombrado como Fiscal General de Colombia.
Pese a que había una estrecha relación entre Santos y Martínez, fue el entonces encargado del ente acusador quien a comienzos de 2017 informó sobre el ingreso de sobornos de Odebrecht pagados desde Brasil a Colombia. Según Martínez, la constructora le pagó un millón de dólares a Otto Bula, exsenador del Partido de la U, por el contrato de la vía Ocaña-Gamarra. Pagos que fueron consignados a la gerencia de la campaña de reelección de Santos en 2014.
Gistic Logistic Soluciones
Como también ha sido conocido, Gistic Logistic Soluciones Integrales entregó 3 850 millones de pesos a la campaña Santos Presidente (casi dos millones de dólares para aquel año), dineros que fueron repartidos entre dirigentes del Partido Liberal, incluido Simón Gaviria, hijo de César Gaviria.
En su carrera por quedarse con la presidencia, la campaña de Santos apostó al todo vale para imponerse en los comicios y ganarle al uribismo. Uno de los objetivos era la publicidad de la campaña. Ya se sabe que la constructora brasileña pagó una factura por 400 000 dólares en afiches para la campaña de Santos en 2010, hecho confesado por Roberto Prieto, quien fue gerente de la campaña presidencial. Pese a la declaración, la Fiscalía archivó la investigación en su contra y Prieto fue condenado a cinco años por los delitos de interés indebido en la celebración de contratos, tráfico de influencias y falsedad en documento privado por el caso Odebrecht.
Entre los audios de Prieto y este video de Andrés Sanmiguel, de la empresa Gistics Soluciones Integrales, quien afirma que el dinero que recibió de Odebrecht fue para la reelección de Santos, qué más pruebas necesitan para poner preso al mitómano? #ReelecciónCorrupta pic.twitter.com/s00JPN8cOQ
— Senador Carlos Felipe Mejía (@CARLOSFMEJIA) July 8, 2019
En este sentido, para apalancar su campaña a la presidencia, el entonces exmandatario empezó con las aparentes amenazas entre elegir la guerra o la paz, refiriéndose a la negociación que adelantaba con la guerrilla de las FARC y el plebiscito por la paz que buscó refrendar los acuerdos. “Los colombianos podrán escoger entre quienes queremos el fin de la guerra y los que prefieren una guerra sin fin”.
Con firma de decreto para convocar al plebiscito damos un paso más hacia la paz. La pregunta es clara y sencilla. pic.twitter.com/NLE8Qg5ZWz
— Juan Manuel Santos (@JuanManSantos) August 30, 2016
Dicho mensaje fue acompañado con agradecimientos para Germán Vargas Lleras, jefe de Cambio Radical, y su fórmula vicepresidencial, y para César Gaviria, jefe del Partido Liberal. Ambos políticos, hoy enlodados en investigaciones por corrupción, Vargas Lleras por contratos ficticios con la cementera Cemex y Gaviria por Odebrecht.
Sanmiguel y los contractos ficticios
En su testimonio, Andrés Sanmiguel Cataño reveló que a mediados de 2014 fue llamado por uno de sus socios, quien le solicitó ayuda para realizar unos pequeños contratos. Fue a través de este socio, David Fernando Portilla, que se habría realizado el traslado de la millonaria suma a su cuenta. Dineros que a su juicio estaban asegurados para la campaña reeleccionista de Santos.
El empresario aseguró haber trabajado para Fagar Servicios 97 SL, empresa en la que Portilla figuraba como representante legal. Al parecer, a Sanmiguel no le iba muy bien en su empresa por eso aceptó trabajar con él. Es aquí cuando aparece el nombre de Gistic Logistic Soluciones Integrales, pues Sanmiguel le cedió a Portilla las acciones a cambio de que este le retribuyera el 50 % de los contratos. La principal razón del por qué Portilla quedó en Gistic era porque no quería entrometer a los españoles de Fagar Servicios en la intermediación de los sobornos de Odebrecht. Fagar Servicios 97 SL llegó a Colombia en 2010 y fue constituida por empresarios españoles para ofrecer servicios de construcción de obras de ingeniería civil. Portilla fue el representante legal en Colombia hasta 2015, pero la compañía entró en proceso de liquidación en el 2014.
Según la Cámara de Comercio de Bogotá, Gistic fue matriculada con un capital de 80 millones de pesos, según reseña la documentación que fue enviada el pasado 14 de marzo por la Fiscalía al Consejo Nacional Electoral (CNE), entre ella, la declaración de Sanmiguel.
“Pasó un año y David me dijo que todavía no había hecho ningún negocio con la empresa, entonces le pedí que me la devolviera. En diciembre de 2013 me devuelve esta empresa y yo la pongo a nombre de mi señora”, explicó Sanmiguel.
Según Sanmiguel, Portilla estaba trabajando en un negocio con Metrolínea, sistema de transporte masivo de la ciudad de Bucaramanga, negocio que se estaba llevando a cabo con Esteban Moreno, su hombre de confianza y que a la vez era muy cercano al liberal Simón Gaviria, pues trabajó en la campaña al Congreso del Partido Liberal en 2014.
De acuerdo con el empresario, Portilla le dice en enero ’¿se acuerda del negocio que le conté? Es para hacer mantenimiento de una vía’. “Yo fui a una reunión para ver qué era lo que se iba a hacer. Salí muy preocupado y le dije a David que esa era una obra importante, que quién la iba a hacer y él me dijo ‘fresco, que eso yo lo organizo’”, indicó Sanmiguel en su testimonio.
Comentó el empresario que seis meses después y luego de haberse dejado de hablar con Portilla, llegó un día de manera desesperada a preguntarle por un dinero consignado a la cuenta de su empresa Gistic Logistic.
“David llega un día como loco, como loco literalmente a decirme: qué hubo papito, ya te consignaron una plata en tu cuenta, y yo… De qué me está hablando… que si ya le consignaron una plata en la cuenta, y esa plata necesito que la saque ya….. y yo le dije, pero de qué me está hablando”.
Sanmiguel sostuvo que los dineros fueron consignados a la cuenta de su empresa y que eran producto de un contrato ficticio para la Ruta del Sol, obra de infraestructura en cuyo consorcio participó Odebrecht. La millonaria suma fue entregada de manera urgente a Moreno, quien la recogió en los bancos en Bogotá en un carro blindado y con más de 20 escoltas. Finalmente, aseguró que ese dinero era de un proyecto del consorcio Consol, al que pertenecía Odebrecht, pero nunca se ejecutó.