En el Aeropuerto Internacional de Maiquetía Simón Bolívar, que presta servicio a la capital de Venezuela, Caracas, puede que no funcione el aire acondicionado, o falte el servicio de agua o de electricidad, o los sanitarios carezcan de papel higiénico, o que asalten a los pasajeros dentro del terminal; pero con lo que si cuenta es con un stand para hacerse selfies.
Y es que la planta baja del terminal, por donde los viajeros deben pasar para embarcarse en sus vuelos, está decorada de extremo a extremo de una obra llamada “Cromointerferencia de color aditivo”, diseñada por el famoso artista cinético venezolano, Carlos Cruz-Diez, e instalada en 1978.
Desde que comenzó el éxodo venezolano, motivado por la crisis política, social y económica generada por los regímenes de Hugo Chávez y su sucesor, Nicolas Maduro, la pieza artística se ha convertido en un ícono de despedida. La mayoría ha adoptado la costumbre de hacerse fotos con el fondo de la obra que caracteriza al terminal.
Ante esto, parece que el régimen de Maduro decidió hacerle las cosas más fáciles a quienes huyen del país por ese aeropuerto. Desde enero de 2018 instalaron este punto, donde el viajero y sus familiares pueden tomarse fotos cómodamente con el fondo de la obra de Cruz Diez, o incluso tienen la opción de otro background, como uno de los típicos pasillos que llevan a los aviones. “Hazte una selfie”, se lee a los pies del stand.
En las redes sociales, son muchos los que consideran el nuevo “servicio” que ofrece ahora el Aeropuerto de Maiquetía como una burla. “Qué ‘detalle’ del aeropuerto internacional de Maiquetía ponerte el stand con la obra de Cruz – Diez para que emigres sin contratiempos. Tómate tu foto y chao, fuera”, tuiteó Christian G. Velasco (@ChrisPrensa), quien se describe como subdirector de Información. Periodista en ejercicio y ciudadano.
Hazte una selfie. Qué "detalle" del aeropuerto internacional de Maiquetía ponerte el stand con la obra de Cruz – Diez para que emigres sin contratiempos. Tómate tu foto y chao, fuera. pic.twitter.com/Q84ThbNhZF
— Christian G.V (@ChrisPrensa) January 7, 2018
Otro tuitero, José Ortiz, escribió: “Waooo no había visto esto, Vete, fuera de acá, no haces falta, estorbas al régimen sino eres dócil, Chao … Hasta donde han llegado, burla y desprecio por un grupo importante de seres humanos venezolanos”.
Podría también tratarse de una medida de protección de la obra de Cruz-Diaz. En febrero, El Nuevo Herald publicó una nota donde destaca que un grupo de venezolanos ha decidido, en vez de la foto, llevarse las pequeñas lozas que conforman el mosaico.
Según el diario, este vandalismo no es nuevo. Fue reportado por el medio digital El Pitazo en septiembre de 2015 cuando realizaban un reportaje sobre el deterioro de la obra de Cruz-Diez. Durante su trabajo de investigación, grabaron a una joven venezolana cuando se agachaba a recoger su cuadrito. “Me estoy llevando el pedacito de Cruz-Diez porque no sé si cuando vuelva al aeropuerto ya no esté el diseño en el piso, como me pasó con el de La Guardia”, dijo en esa oportunidad una estudiante, identificada como Mariely Romero.
Otra teoría puede ser la esgrimida por @takeso_kensey en un tuit el pasado 30 de agosto. “Yo creo que es para que te tomes las fotos sin mostrar lo destruido del terminal o la cantidad de personas que se están yendo… además del simple hecho de reafirmar su característica más significativa como chavista, molestar o joder”, dijo.
Y ante el deterioro del principal puerto aéreo de entrada al país -porque los más utilizados para salir del territorio venezolano son las fronteras terrestres, especialmente con Colombia y Brasil-, el stand del selfie en el aeropuerto de Maiquetía luce más una cínica burla del régimen. O quien sabe si la estructura cuenta con una cámara escondida para registrar a los que se van, en este país donde el G2 cubano es rey, cualquier teoría conspirativa es plausible.