
El senador Armando Benedetti, perteneciente al Partido de la U el mismo del presidente Santos, acusó en la sede del Congreso de la República a la representante a la cámara María Fernanda Cabal del Centro Democrático (CD), partido del senador Uribe, y a Jose Felix Lafaurie presidente de la Federación Colombiana de Ganaderos, de estar detrás de la publicación de unas cartillas falsas de educación sexual que supuestamente circulaban en los colegios.
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El escándalo se dio después de que la diputada Ángela Hernández denunciara que en los colegios se estaba implementando una “ideología de género” por lo que se generó una gran polémica a la que se sumó la aparición de dos cartillas falsas que supuestamente estaban siendo utilizadas en los colegios: una correspondía a una revista pornográfica europea y la otra a un documento técnico de la ONU, sin embargo, ninguna de ellas era utilizada por el Ministerio de Educación como se afirmó en su momento.
Debido a esto el Senador Benedetti aseguró que las cartillas fueron publicadas a través del portal ‘Costa Noticias’ el 4 de agosto en la mañana y fueron replicadas por los miembros del Centro Democrático. Además aseguró que “esa página tiene unos dueños que vienen siendo María Fernanda Cabal, Duván Eduardo Ibarguen y José Félix Lafaurie porque les publican todas sus columnas periódicamente”.
“Ahí fue donde empezaron la difusión de las cartillas. Las imágenes de esas cartillas corresponden a cómics belgas publicados en 2006 pero esas supuestas cartillas fueron adaptadas por Costa Noticias para configurar algo que dan por verdad” aseguró Benedetti.
Finalmente, el Senador Benedetti anunció que presentará una demanda penal por injuria y calumnia y falsedad en documento público en contra de quienes elaboraron las falsas cartillas y realizaron los montajes para desprestigiar al Ministerio de Educación.
El escándalo por las cartillas de educación sexual
El Escándalo inició cuando la diputada de Santander Ángela Hernández dijera públicamente que el Ministerio de Educación buscaba implementar una ideología de género. La diputada se quejó por el hecho de que a los niños les dieran clase de educación sexual enseñándoles la diferencia entre género y sexo o la posibilidad de que vistieran un uniforme que no correspondiera a su sexo.
Posteriormente, aparecieron unas cartillas pornográficas producidas en Bélgica y se dijo que dichos cómics eran utilizados para instruir sexualmente a los menores en los colegios, información que fue desmentida. Una segunda cartilla apareció con los logos de la ONU y el Ministerio de Educación sobre las políticas antidiscriminación, sin embargo se trataba de un documento técnico que no tenía autorización para ser publicado y no una cartilla como tal.
Finalmente, la Ministra de Educación Gina Parody, tuvo que defenderse en un debate de control político realizado en su contra el día de ayer 16 de agosto en el cual declaró que era víctima de persecución por ser lesbiana.
Fuentes: El Espectador, El Tiempo