El pasado domingo 12 de marzo, Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, denunció una supuesta “campaña internacional” contra el papa Francisco.
“Hemos estado en estos días viendo la campaña internacional […] una campaña contra el papa, porque el papa está diciendo grandes verdades a todo el mundo”, dijo el mandatario en su programa semanal “Los domingos con Maduro”.
El jefe de Estado afirmó que el mundo cuenta con “un gran papa” que “siempre” da una palabra “sabia, de justicia”.
El presidente incluso mandó a rezar por la protección del papa. “Alerta a los católicos del mundo oremos por el papa Francisco y apoyemos al papa Francisco así lo decimos desde Venezuela que no tenemos pelos en la lengua para decir las verdades”.
Para Maduro, el papa Francisco “persiste en acompañar” el diálogo político en Venezuela, de hecho, el vaticano fue el mediador en las reuniones entre la dictadura de Nicolás Maduro y la oposición.
La oposición por su parte, ha calificado el diálogo “una burla para los venezolanos” y aseguran que el balance ha sido “negativo”.
Inclusive, la División de las Américas de Human Rights Watch (HRW) pidió a la Organización de Estados Americanos (OEA) que aplique la Carta Democrática sobre Venezuela, ante la grave crisis que aflige a ese país, y que se dejara de perder el tiempo con el diálogo.
El diálogo político en Venezuela promovido por el emisario del papa, buscaba resolver la crisis económica, política y social que se vive en el país; sin embargo, desde que este proceso inició, solo se ha recrudecido la represión sobre la disidencia, según ha denunciado la misma oposición.
Fuentes: La Patilla; Minci.