El gobierno canadiense se suma a la polémica de los presuntos “ataques acústicos” en Cuba contra diplomáticos, al anunciar que al menos uno de sus miembros ha sufrido pérdida auditiva durante su misión en La Habana.
Según indicó el portavoz de Asuntos Globales de Canadá, Brianne Maxwell, ya empleados de varias agencias del gobierno canadiense “están conscientes de los síntomas inusuales que afectaron al personal diplomático canadiense y estadounidense y a sus familias en La Habana”.
Asimismo, Maxwell informó que se “está trabajando activamente, incluso con las autoridades de Estados Unidos y Cuba, para determinar la causa” de los “síntomas inusuales que afectaron a trabajadores diplomáticos”.
De acuerdo a fuentes del gobierno de Justin Trudeau, no fue solo su diplomático el que sufrió “síntomas inusuales” en su viaje a Cuba, su familia también se vio afectada durante su estadía en la isla caribeña, perdiendo también capacidades auditivas y presentando jaquecas.
El gobierno estadounidense ha atribuido estos síntomas físicos de su cuerpo diplomático, ha un “ataque acústico” con “dispositivos de sonido”, que les hizo perder capacidad auditiva.
Esta polémica inició luego de que una portavoz del Departamento de Estado estadounidense revelara que el pasado mes de mayo se debió expulsar de Cuba a dos de sus diplomáticos como consecuencia del supuesto “ataque acústico” que sufrieron tanto sus trabajadores como los familiares del Departamento de Estado que permanecían en la isla.
Según Estados Unidos, su personal habría sido víctima de dispositivos ultrasónicos instalados en sus residencias, donde también había menores, con el fin de espiarlos.
Funcionarios con conocimiento de la investigación del caso, explican que los ataques habrían empezaron en el año 2016, en pleno acercamiento de la administración Obama con el gobierno de Raúl Castro, cuando una serie de diplomáticos estadounidenses comenzaron a sufrir pérdidas inexplicables de audición.
Fuentes: Cubanet; T13; El Nuevo Herald; BBC.