Desde las vísperas, el gobierno cubano anunció que el día 25 de mayo haría una cadena en vivo a través de Internet sobre sus avances en materia de Derechos Humanos. Sin embargo, dentro y fuera de la isla surgieron testimonios alegando lo contrario.
La primera contradicción de lo emitido en la transmisión es que se apelaba a la tecnología para transmitir al mundo algo a lo cual el cubano promedio no puede acceder, usar Internet desde la comodidad del hogar.
Entre las intervenciones anunciaron que en Cuba las mujeres gozan de derechos plenos y no sufren discriminación por su raza ni creencia. Sin embargo, domingo tras domingo, se pone en evidencia lo contrario. Pues ese es el día que marchan las Damas de Blanco, quienes van juntas a misa y emprenden su marcha para exigir la libertad de los presos políticos.
De hecho, el 22 de mayo, aniversario número 15, sin siquiera haber marchado, la líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, una mujer de raza negra y fe católica fue detenida con violencia afuera de su propia casa, las casas de las demás damas fueron sitiadas.
Luego, detallaron los beneficios de la maternidad. Ya en este espacio, hace pocos días, se expuso las condiciones en las cuales llegan los niños cubanos al mundo. En la provincia de Santa Clara, por ejemplo, mostramos el caso de una adolescente cuyo bebé murió en sus entrañas y los médicos tardaron cinco días para removerlo y ni siquiera lo hicieron sino que le indujeron el parto y pese a su corta edad le expusieron al dolor del parto para expulsar a un niño sin vida.
Y no fue la única, en la misma habitación, ya que no había divisiones, yacían otras 31 mujeres, con un solo baño para ellas y sus acompañantes, quienes por orden de los médicos, en su mayoría estudiantes y extranjeros que pagan con trabajo la educación recibida en Cuba, ya que los médicos cubanos sirven como publicidad en el extranjero, debían salir de la maternidad en el horario que iban los médicos y por tanto no estaban al tanto del estado de salud de las parturientas.
Una de ellas, con apenas 14 años, llevaba 40 semanas de embarazo y dos días sin ser atendida, pese a las contracciones que experimentó, hasta que se detuvieron… Estaba inflamada y al pedir su madre que le indujeran el parto, vociferó contra el partido comunista por la indignación de un servicio estatal ineficiente mientras lo hacía, y logró que llegue antes la seguridad del Estado para investigar que los propios médicos para investigar.
Cuando finalmente fue atendida, al tercer día, los médicos indicaron que no se puede inducir un parto hasta la semana 41. Al día siguiente, el cuarto de hospitalización, el médico de cabecera indicó a la madre de la parturienta que tenía apenas 38 semanas de gestación y por tanto habría que esperar otras tres semanas para inducir el parto. Es decir, los médicos no podían inducir un parto porque faltaban días pero sí podían retroceder semanas en el tiempo para impedirlo.
Finalmente, al quinto día de hospitalización, nació un varón por parto natural y con complicaciones en su frágil salud. Sin embargo, está vivo, no gracias a los médicos sino a pesar de ellos.
Lo cual no es contrario a lo que pregonan los difusores de Derechos Humanos del régimen sino acorde. Pues detallan al aborto entre los servicios disponibles, tanto por inducción como por omisión, como en el caso antes expuesto.
Irónicamente, el punto siguiente fue “los derechos de los niños”. Sin pudor y con segundos de diferencia de la declaración de la facilidad de acceso de los abortos, la Fiscalía General de la República de Cuba una jurista denomina al aborto un derecho humano y luego procede a hablar de los derechos del niño, ya que son los “multiplicadores de los valores”.
Por último, los atropellos a los Derechos Humanos de los ciudadanos cubanos no se limitan únicamente a lo largo de sus vidas, tampoco son respetados después de la muerte. Hace apenas días fue profanada la tumba del pastor adventista Argelio Rosabal Fonseca que rescató a los revolucionarios a bordo del yate Granma, donde viajaban los Comandantes Che Guevara, Ramiro Valdés y Juan Almedia Bosque, ya que el régimen busca intimidar a sus descendientes para expropiar la casa que le fue dada por su labor humanitaria.
Dichos intentos de expropiación han causado persecuciones contra la familia que provocaron ya cuatro intentos de suicidio por parte de su nieta de 14 años, luego del arresto de su padre Omar Rosabal Sotomayor, método usual para expropiar viviendas, fabricar delitos falsos para arrestar a los habitantes, desocupar sus casas y finalmente apropiarse de ellas.