El incendio que logró colapsar el techo de la Iglesia Notre Dame de París no dio tregua. Aunque la versión oficial es que el motivo preliminar del incendio fue un error en la remodelación, no se trataría del primer incidente. Sucedió en medio de una ola de hasta tres atentados y actos de vandalismo contra la Iglesia Católica diariamente en Francia.
En el 2018 hubo 1.063 casos, mientras que en el 2017 hubo 1.045. Es decir, desde que Emmanuel Macrón asumió la presidencia.
Tres días antes del incendio en Notre Dame, fue sentenciada una de las tres mujeres acusadas de planificar un atentado terrorista contra la Catedral en 2016.
Las implicadas fueron denominadas “radicalizadas”y una de ellas confesó su lealtad al Estado Islámico.
De acuerdo con el Ministerio del Interior francés, la cifra aumenta cuando se toman en consideración la profanación de tumbas, saqueo de iglesias, pintadas obscenas en las paredes y lugares de culto, al igual que la grabación de vídeos sacrílegos.
Notre-Dame Cathedral in Paris was completed in the mid-12th century, vandalised duing the French Revolution in the 1700s, featured as a central character in the 1831 Victor Hugo novel and survived the devastation of two world conflicts in the 20th century pic.twitter.com/ht8RCv9Xql
— AFP news agency (@AFP) April 15, 2019
El 5 de abril hubo un incendio en la iglesia de Saint-Sulpice en París pero, nunca se descubrió el motivo. Tampoco se atrapó a los culpables, pese a que el sacerdote presente vio a un hombre colocar madera para avivar el incendio que quemó las puertas y causó daños millonarios.
La incidencia de ataques y delitos contra la Iglesia Católica en Francia provocó un organismo de seguimiento de lo sucedido al mando del Episcopado francés, donde los sacerdotes de todo el país informan a la jerarquía desde robos hasta profanaciones.
Esto ha logrado que los delitos se dividan en dos formas, en particular en caso de robo, cuando sucede por el valor económico y cuando nace de un sentimiento anti-cristiano.
Dado que son abiertas al público, no están bajo vigilancia y objetos de valor -como un cáliz que costaría entre 200 y 2.000 euros- resultan un bien atractivo.
Mientras que los crímenes vinculados al odio, como en la ciudad de Nimes, por ejemplo, consistieron en escribir y formar una cruz las paredes con excremento.
Esto sucedió en la iglesia de Notre-Dame des Enfants (Nuestra Señora de los Niños), donde además saquearon el altar principal y el sagrario, robaron las hostias consagradas y luego las arrojaron en el basurero.
Las hostias, que de acuerdo a la transubstanciación del rito católico representan el cuerpo de Cristo, también fueron motivo de ataque en la ciudad de Dijon, donde la iglesia de Notre-Dame fue saqueada y profanada. Luego de romper el tabernáculo del templo, las hostias que estaban en su interior fueron arrojadas al piso y pisoteadas.
Zonas donde la población es mayormente migrante, como los suburbios de París, han visto los vidrios -adornados con la técnica de vitral- estallados, al igual que el órgano de la iglesia destruida; como el caso de la Basílica de Saint-Denis, de más de 800 años de antigüedad.
Hasta 70.000 euros en objetos logró robar una pareja rumana detenida en septiembre del 2018, las autoridades creen que estuvieron detrás de varios robos de iglesias tanto en París como en los suburbios.
Según ABC de España, “Francia vive una ola de vandalismo anticristiano sin precedentes“.
Pres. Trump calls Notre Dame fire "a terrible sight to behold."
"That is beyond countries, that's beyond anything. That's a part of our growing up, it's a part of culture. It's a part of our lives." https://t.co/kiOQsrXiTi pic.twitter.com/ejdycm9IjT
— ABC News (@ABC) April 15, 2019
No obstante, el presidente de los EEUU, Donald Trump, plantea que “está más allá de los países, está más allá de cualquier cosa. Es parte de nuestro crecimiento, es parte de la cultura. Es parte de nuestras vidas”, dado que la Catedral de Notre Dame de París es patrimonio de la humanidad y por tanto su destrucción un suceso de impacto mundial.
Todavía es incierto si el incendio en la Catedral de Notre Dame de París se trató de un accidente en la obra de remodelación o de un atentado. La primera versión es la que sostienen las autoridades.
Al estar ante la mira mundial, ya salió a la luz que en Francia se vive una ola de ataques denominados anticristianos, particularmente contra la Iglesia Católica.
“Aunque nadie murió, es como un 11 de septiembre francés. Es un gran shock. Esta iglesia estuvo allí por más de 850 años. Incluso los nazis no se atrevieron a destruirlo “, declaró el alcalde de Neuilly-sur-Seine, Phillipe Karsenty, a cargo de una comuna parisina, que estuvo en las inmediaciones del siniestro.
Agregó “hemos tenido iglesias profanadas cada semana en Francia, en toda Francia. Así que, por supuesto, escucharás la historia de lo políticamente correcto, la corrección política que te dirá que es probablemente un accidente”.
Karsenty concluyó alegando que hay que estar preparados para una versión oficial que descarte la posibilidad de un atentado, mientras él, al contrario, ve un vínculo entre la ola de ataques contra tres iglesias diarias y lo sucedido en Notre Dame.
Dada la gravedad del caso, el reportero interrumpió la entrevistado para instar que es necesaria la evidencia antes de descalificar la versión oficial; alegando que la causa del incendio lo tendrán que determinar los investigadores.