Millones de brasileros se tomaron las calles este domingo 26 de mayo a favor de las medidas del Gobierno del presidente Jair Bolsonaro, y en rechazo a la “vieja política” clientelista del Congreso, a la cual acusan de impedir el avance de las reformas necesarias para impulsar la economía del país, que hasta el momento no tiene el crecimiento prometido.
Mientras estadísticas recientes anuncian que la popularidad de Bolsonaro ha bajado, millones de simpatizantes tomaron las calles para afirmar su respaldo; en particular para avanzar con el recorte de las pensiones, pues el 53,4 % del presupuesto anual del Estado está destinado a las pensiones de la casta política brasilera.
Uno de los factores que ha reducido el apoyo al presidente en las encuestas, es que la economía no ha crecido en la medida que se esperaba. Por eso la mayoría de los grandes empresarios que apoyaron a Bolsonaro en la campaña presidencial, no lo hicieron en las manifestaciones; a excepción de Luciano Huang, quien desde Corea alentó a protestar.
Sin embargo, otras promesas sí se han cumplido pese a los obstáculos puestos por el Congreso. Por ejemplo, De enero a abril, el país registra la creación de 313 835 empleos, lo que significó una caída del desempleo del 6,83 % frente al mismo período del año pasado. Además, abril registró su punto más alto en los últimos seis años, con 129 601 nuevas contrataciones.
El desempleo bajó 6,83 % en lo que va del 2019. (Globo)Asimismo, los homicidios bajaron un 24 % durante la gestión de un mandatario que devolvió a los ciudadanos el derecho a la legítima defensa. Cabe resaltar que el combate a la delincuencia fue el foco principal de su campaña.
Masiva asistencia a las marchas
Según la policía militar, a las 2:00 de la tarde de este domingo, solo en la Plaza de la Independencia, en Santos, ya había más de 1 millón de personas, y a lo largo de la tarde seguían llegando simpatizantes.
La cantidad de manifestantes en Río de Janeiro fue equivalente, visible en las estaciones del metro con camisetas de colores patrios (verde y amarillo).
En cada uno de los 26 estados de Brasil hubo manifestaciones a favor de Bolsonaro. De modo que se trata de una iniciativa masiva que abarca a todo el país.
Además, 20 000 participantes se manifestaron frente al Congreso Nacional, en la capital del país (Brasilia). Incluso hubo manifestantes vestidos de langostas para ejemplificar los lujos que se da la clase política a expensas de sus ciudadanos.
– Metrô de Copacabana, Rio de Janeiro, há pouco. pic.twitter.com/hus90Khguv
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) May 26, 2019
Manifestantes ven a Bolsonaro como líder frente a la “vieja política” clientelista
La motivación de la manifestación masiva se enfoca en cuatro puntos: en la defensa de la reforma de la Previdencia, del paquete anticrisis; de la medida provisional de la reestructuración de los ministerios y el repudio al centrón; al igual que el apoyo al proyecto anticorrupción del ministro de Justicia y Seguridad Pública, Sergio Moro.
En la política de Brasil, Centrón, en portugués Centrão, se trata de una postura centrista compuesta por un conjunto de partidos políticos que tienen como objetivo asegurar una proximidad al poder Ejecutivo para garantizar ventajas y distribuir privilegios por medio de redes clientelistas.
Por su parte, “Previdencia” es la reforma que más polémica ha causado. Consiste en un recorte a las pensiones de los jubilados. Sin embargo, la generación actual lo ve como una medida necesaria y confía que las políticas actuales permitirán mayor prosperidad para que los ciudadanos puedan responder por su propio porvenir, en lugar de esperar su ración en la vejez.
Las imágenes de ancianos, abuelos y jubilados buscan afirmar su respaldo a esta reforma, puesto que la medida afectaría principalmente al sector público más que al privado.
– Presidente, Ministros, Senadores, Deputados, Governadores, Prefeitos, Vereadores, Juízes: VEJAM A NOSSA RESPONSABILIDADE. pic.twitter.com/dieNKWqY4F
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) May 26, 2019
Más del 55 % de los brasileros votaron a favor de Jair Bolsonaro. Y a través de la multitudinaria protesta, dejan de manifiesto que los obstáculos del legislativo impiden que se cumpla la voluntad popular.
Bolsonaro y la democracia
Contrario a lo que se afirma de Bolsonaro, que es “ultra”, “extremo”, incluso fascista, y que busca acabar con el Congreso, durante su mandato le ha dado autonomía al Parlamento, entidad que no ha permitido el avance de las reformas con las que busca recuperar la economía del país, la cual fue puesta en peligro cuando la izquierda estaba en el poder.
Aunque su partido, el Social Liberal, es el que más diputados tiene, con 52 escaños en el Congreso, todavía se enfrenta a 56 del Partido de los Trabajadores, fieles a Lula da Silva y al socialismo del siglo XXI, y los demás partidos son hostiles a su gestión. Es decir, no goza de una mayoría para gobernar.
No obstante, resalta que no busca enfrentarse al Congreso, mucho menos destruir las instituciones republicanas: “Hace unos días fui claro al decir que quien estaba pidiendo el cierre del Congreso o STF (Corte Suprema Federal) hoy estaría en la manifestación equivocada. La población mostró eso. Su gran mayoría fue a las calles con pautas legítimas y democráticas, pero hay quienes insisten en distorsionar los hechos”, afirmó en redes sociales Bolsonaro.
Há alguns dias atrás, fui claro ao dizer que quem estivesse pedindo o fechamento do Congresso ou STF hoje estaria na manifestação errada. A população mostrou isso. Sua grande maioria foi às ruas com pautas legítimas e democráticas, mas há quem ainda insista em distorcer os fatos.
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) May 26, 2019
Dado que Brasil es una democracia representativa, el poder viene de la voluntad popular y por tanto Bolsonaro ha dicho que los parlamentarios deben ser juzgados en las urnas, no rompiendo las estructuras republicanas.
En respaldo a lo dicho por el mandatario, sus simpatizantes tomaron las calles en contraposición a los movimientos sociales recientes que se manifestaron contra el recorte de presupuesto en áreas como la educación universitaria, que Bolsonaro acusa de adoctrinar a los jóvenes con ideología marxista, la misma que destruye las instituciones republicanas y fomenta la dependencia al Estado, en lugar de la autonomía del ciudadano.
“Creo que Brasil camina cada vez más para la madurez de su democracia, con representantes sensibles a los anhelos de la sociedad”, afirmó el presidente de Brasil.
“El carácter pacífico de los actos de hoy traduce la esperanza y la confianza del pueblo en el compromiso que los políticos tenemos con el futuro del país”, agregó.
https://twitter.com/jairbolsonaro/status/1132654696794120192