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Bolivia celebró elecciones presidenciales en medio de denuncias por fraude. Al menos 100 fiscalizadores fueron detenidos por fuerzas policiales leales a Evo Morales, candidato del Movimiento al Socialismo, que no reconoce el balotaje y exige se declare su triunfo unánime.
Oficialmente Morales superó a Carlos Mesa con 45 % de los votos frente a 36 %, suficiente para una segunda vuelta. Pero Evo declaró públicamente que no permitirá la segunda vuelta, tiene la pretensión de llevarse el triunfo en primera vuelta.
Sin embargo, la oposición denuncia que la candidatura de Evo es inconstitucional y advierten sobre riesgos de que Mesa, más que un opositor, sea un colaborador.
PanAm Post se comunicó con el diputado uninominal Jose Carlos Gutierrez Vargas de Bolivia Dice No, iniciativa ciudadana que surge luego que la mayoría de los bolivianos votaron en contra de la reelección inconstitucional de Evo Morales en un referéndum ignorado por él.
¿Qué nos dicen los resultados sobre el proceso electoral en Bolivia?
Prácticamente los resultados de este proceso electoral marcan una tendencia de rechazo a Evo Morales, un voto que está centrado no precisamente en el mejor candidato, sino en el candidato que puede sacar a Evo Morales. Eso significa un voto solamente con la intención de que Evo se vaya y nada más. No importando qué tipo de candidatura, qué tipo de propuesta, qué tipo de acompañantes tiene. Y en todo caso, se resume en el cansancio del Evismo durante 13 años y el rechazo a todo lo que significa corrupción, narcotráfico, abuso de poder, cooptación de órganos, que en definitiva, deben darle solución a la gente, como el Tribunal de Justicia, como el propio órgano electoral, como el propio órgano legislativo que tiene que legislar en favor de la ciudadanía y un sinfín de autoridades que han cometido abuso, corrupción, saqueo y una mala planificación del Estado. Estamos hablando de que el hastío y el cansancio que se tiene de Evo Morales es resultado de la misma elección.
Un gobierno que se viste de rostro indígena y le roba a los indígenas, es un gobierno impostor y cómplice de la corrupción. pic.twitter.com/pjbUNySzQ5
— Jose Carlos Gutierrez Vargas (@jcgutierrezv_) October 17, 2019
El resultado de tener una luz de esperanza a través de cualquier candidato, sea cual sea, pero que tenga la posibilidad de sacarlo.
Evo anunció que no reconoce pasar a segunda vuelta. ¿Es posible que anule el balotaje?
Nosotros creemos que en Bolivia todo puede pasar. Si ya Evo Morales tuvo la capacidad de pasarse por encima de la Constitución, ir a un referéndum, no reconocerlo, desconocerlo a través de una sentencia constitucional totalmente manipulada, burlarse del país, interpretar como quiso la propia decisión del pueblo boliviano realizada en el 21 de febrero de 2016; esto puede obviamente pasar. Puede que no lo reconozca, pero es casi imposible. La gente está cansada y en ese sentido creo que tampoco los números le dan. Lo que podría haber es una manipulación informática. Lo que podría haber, obviamente es un fraude para justificarlo, porque creo que este país se podría convulsionar si él presiona los números o presiona los resultados más allá de los límites que pueda manipular.
¿Hay evidencia de fraude?
Las evidencias del fraude están en definitiva a flor de piel. La pregunta es sí hay una justicia que pueda determinarla y es el inconveniente que tenemos en este país. La policía, el propio órgano electoral, los jueces electorales, la Fiscalía, no van a ceder. En favor de la población, que es la que reclama, ni tampoco van a ceder en favor de una justicia que prácticamente está cooptada por el MAS y que obviamente manipula, en la que el propio gobierno interrumpe y además extorsiona.
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Por lo tanto creo que el Movimiento al Socialismo en ese sentido tiene ventaja, pero creo que está provocando, en la provocación está el gran problema. Las evidencias son clarísimas, hace mucho tiempo es evidente el fraude permanente que sufre este país, pero sin embargo, con instituciones valga la redundancia desinstitucionalizadas, con instituciones totalmente cooptadas, con una corrupción al máximo.
En caso que gane Mesa, ¿habrá cambios reales?
Tenemos muchas dudas en ese sentido. Nosotros venimos criticando como oposición a la actitud de Mesa, una actitud muy complaciente con el régimen de Evo Morales durante 13 años. No olvidemos que él fue vocero de la causa marítima. En nuestro criterio, él es un invento del massismo a través de las propias encuestas. Cuando estaba en la vocería marítima ha habido mucha lisonja de parte de Don Carlos Mesa en su lectura sobre la realidad del país, sobre sus opiniones, y obviamente, el favoritismo que tenía con Don Evo Morales. Bueno, la política es de oportunistas y de oportunidades también.
No sé cómo calificar la actitud del señor Mesa, pero creemos que cuando uno no tiene una base estructural fuerte que tenga una relación con la población, cuando armás una comunidad ciudadana, que es el partido que representa Carlos Mesa en alianza con el FRIC, que tiene la personería jurídica y no sienta las bases, la veo muy endeble. Personalmente así lo veo, porque también hemos tenido alguna cercanía con el seguimiento que se le ha hecho al señor Mesa y a la propia ciudadanía, siendo de otro partido diferente.
Complementando la funcionalidad o no del señor Mesa. Nosotros tenemos demasiadas dudas. Creo que el 2005, cuando entró don Evo Morales, la población votó por don Evo Morales, porque rechazaba a los partidos tradicionales. Fue un voto también de molestia y rechazo a una era política que ya estaba por acabar. Volvemos otra vez a lo mismo. Se repite nuevamente la historia. Se vota por cualquiera con tal de que no esté ya don Evo Morales, precisamente por un desgaste durante 13 años de abuso de corrupción, narcotráfico, un pasarse permanente por encima de la propia ley, de los principios, y obviamente, un gobierno ya desgastado, un modelo ya totalmente acabado y sin ningún tipo de fundamento ni condiciones para seguir adelante. Y la gente termina por optar por algo diferente, pero no por algo mejor.
Por lo tanto, nosotros tenemos muchas dudas. Lo tendremos que ver. Creo que hay inclusive la posibilidad de acomodarse dentro del propio Gobierno, al propio MAS, porque el Gobierno también puede hacerle la vida de cuadritos. El massismo, tiene una estructura mucho más arraigada, mucho más, más categórica en cuanto a un trabajo político permanente e ideológico de principios diferente a los que tiene Mesa. Por lo tanto, la gente se vuelve a reacomodar, se reactiva, y obviamente hay un poder económico grande de parte del MAS para inestabilizar este país cuando le dé la gana, porque no van a tener la fuerza necesaria.
Los de Mesa, el señor Carlos Mesa en caso de entrar al gobierno también va a tener que recurrir a oxígeno y esos oxígenos se lo podría dar tranquilamente el MAS, para no desestabilizar los propios gobiernos. Y eso se presta a negociaciones. Es típico en un país corrupto, en un país que no tiene una cultura política enraizada y donde todo está desinstitucionalizado.
¿Cuál será la labor de la oposición de ahora en adelante?
Tendremos que ver primero quién queda en oposición y tendremos que saber quiénes son realmente los opositores y qué personas van a encarnar esa oposición.
Personalmente, yo he sido electo como diputado uninominal, que significa la elección territorial y exclusiva de un diputado. En ese sentido, yo tengo un compromiso con mi departamento, con el país y por supuesto la democracia, pero creo que hay que seguir fiscalizando. Tenemos además claramente establecido nuestras competencias constitucionales como opositores y en ese sentido creo que hay que presionar por hacer una gestión internacional.
Creo que el mundo necesita conocer y saber a la perfección qué es lo que pasa en este país y la colaboración de otros países. Deberíamos tener la posibilidad de aperturarnos más. Nos hemos enclaustrado en el gobierno de Evo Morales y los únicos amigo que tenemos como gobierno son gobiernos que están destruyendo sus propios países, amigos que han sido corruptos y están siendo procesados; como en el caso de Brasil, Argentina, Ecuador; amigos permanentes como los de Nicaragua, Venezuela, Cuba y una inserción sospechosa iraní en Bolivia; una relación con China de endeudamiento y corrupción de parte de muchas empresas chinas acá, y obviamente, una relación también con Rusia. No lo tenemos muy claro en definitiva, y eso hay que clarificarlo en el contexto internacional. Creo que la oposición debe mirar afuera para seguir clarificando las cosas que no están claras, que nos han escondido durante mucho tiempo.
