EE. UU. ronda los 100 000 muertos por coronavirus y tiene alrededor del 20 % de los casos diagnosticados en el mundo, 1,6 millones de los más de 5,5 millones. En vista que el virus nació en China y fue sistemáticamente ocultado por el Partido Comunista de China, que persiguió a los médicos, periodistas y científicos que lo advirtieron, la administración de Donald Trump ha enfrentado al régimen de partido único.
Estamos “al borde de una nueva Guerra Fría”, advirtió el pasado domingo en una rueda de prensa el ministro de relaciones exteriores de China, alegando que Washington está infectado con un “virus político” que aprovecha “todas las oportunidades para atacar y difamar a China”.
El canciller del régimen comunista, Wang Li, también acusó a los políticos estadounidenses de “difundir rumores” para “estigmatizar a China”.
Desde marzo existe una “guerra de información”, donde China ha puesto a dignatarios de alto nivel a impartir información conspiracionista, como el subdirector general del «Departamento de Información» de China, Lijan Zhao, al igual que Lin Songtian, embajador de China en Sudáfrica, impartiendo propaganda contra EE. UU. en redes sociales.
El embajador Zhao, por ejemplo, compartió un artículo que alega que el coronavirus originó en EE. UU.
This article is very much important to each and every one of us. Please read and retweet it. COVID-19: Further Evidence that the Virus Originated in the US. https://t.co/LPanIo40MR
— Lijian Zhao 赵立坚 (@zlj517) March 13, 2020
Por medio de sus embajadas, China ha enfrentado a varias potencias de Occidente. La página oficial de la embajada china en Francia publicó un artículo donde decía que los países occidentales habían dejado a los ancianos para morir en hogares de cuidado. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia manifestó su inconformidad con lo dicho y China respondió que fue un malentendido.
Pero en Twitter todavía aparece un video donde China se burla de EE. UU. y su manejo de la pandemia, sosteniendo que China advirtió sobre los riesgos de la misma.
Once Upon a Virus… pic.twitter.com/FY0svfEKc6
— Ambassade de Chine en France (@AmbassadeChine) April 30, 2020
El encubrimiento es una extensión de la censura
El video sostiene que China hizo pública su información. Sin embargo, la Comisión de Salud de Wuhan advirtió a los hospitales que no dijeran nada públicamente a los médicos que venían advirtiendo la propagación del virus dentro de los hospitales. E incluso en diciembre cuando los doctores del Hospital General de Wuhan alertaron sobre el brote, fueron detenidos por “difundir rumores”.
El caso más conocido fue el Dr. Li Wenliang, que murió en febrero, luego de haber sido detenido y censurado. Su blog, donde escribió sobre el peligro del virus y su impacto en el hospital, tenía 1,5 mil millones de seguidores y fue silenciado por el régimen.
De acuerdo a las transcripciones del presidente Xi Jinping, el mandatario estaba al tanto de la propagación del virus el 7 de enero (según Associated Press). Pero no tomó acciones para frenar la pandemia. El año nuevo chino se celebró con total normalidad. El 18 de enero se organizó una gran cena compartida para 40 000 familias. Pese al evento multitudinario, ellos no reportaron nuevos casos.
“China será responsable de lo que sufre el mundo por su falta de transparencia”, dice el vicepresidente de EE.UU.
El vicepresidente de EE. UU., Mike Pence, también anunció el domingo 24 de mayo: “China será responsable de lo que tiene el mundo por su falta de transparencia”, y además afirmó que la administración de Donald Trump está desarrollando planes para responsabilizar al Partido Comunista Chino por sus acciones.
“China ha decepcionado al mundo, y la OMS ha sido su principal socio en la retención de información vital sobre el coronavirus que habría permitido una respuesta nacional antes”, exclamó.
“Continuaremos exigiendo que la OMS promueva el tipo de reformas que, si el mundo necesita saber sobre una amenaza potencial para la salud, nos permita saberlo en el futuro”, agregó respecto a la OMS, en consonancia con lo dicho por Trump.
Trump tomó la medida de congelar los fondos de Estados Unidos para la OMS de forma provisional, que representan el 20 % de sus recursos, pero además anunció que si la OMS no se independiza de China los retirará para siempre y meditará la salida de su país del organismo.
Mediante la justicia o la economía, China debe pagar
Desde la Casa Blanca, Trump anunció que Estados Unidos buscará cientos de miles de millones de dólares en daños por parte de China. Aunque agregó que está explorando tomar acciones que sean «mucho más fácil que eso (cobrar)».
“No estamos contentos con China. No estamos contentos con toda esa situación porque creemos que podría haberse detenido (el coronavirus) en la fuente (Wuhan)”, y agregó: “Podría haberse detenido rápidamente, y no se habría extendido por todo el país y el mundo”.
https://twitter.com/thejcoop/status/1254898593573539841?s=20
La medida más extrema que ha considerado Trump y sus colaboradores hasta el momento es despojar a China de su «inmunidad soberana». Esto permitiría presentar demandas no solo a nivel Estado, sino que incluso las víctimas civiles podrían demandar a China por los daños sufridos.
Así lo informó George Sorial (que fue alto ejecutivo en la Organización Trump), que está involucrado en una demanda colectiva contra China, en entrevista con The Washington Post.