El voto cubano influye mayormente sobre la Florida, estado “bisagra” que es uno de los que más define las elecciones de EE. UU., donde se gana no por mayoría sino por representatividad. Por ello, despierta inquietudes el respaldo de Carlos Alberto Montaner, referente del exilio cubano, al candidato demócrata Joe Biden.
Montaner vivió el drama de más de dos millones de cubanos: exiliarse buscando libertad. De adolescente, en los inicios de la revolución, escapó de Cuba en una misión de diplomática. Por semanas, vivió dentro de una embajada e incluso se transportó dentro del baúl de un automóvil con placas diplomáticas.
Por tanto su espaldarazo a Biden ha generado profunda indignación, sobre todo entre quienes han decidido no abandonar la isla, sino luchar contra el régimen día a día, pese a la persecución, pies Biden fue vicepresidente de Barack Obama, quien no solo estrechó lazos con el régimen comunista, sino que además puso fin a la amnistía “pies secos, pies mojados”, que permitía el ingreso de cubanos balseros que pisaban tierra firme en suelo de los EE. UU.
Biden apoyó a Obama en su decisión de romper con más de medio siglo de animosidad entre EE. UU. y el régimen comunista cubano y anunció que en caso de ganar volvería a restaurar dichas relaciones.
En entrevista con CBS Miami, Biden dijo que revertiría la política de Donald Trump, alegando que no tenían justificación y que su postura no se limita a Cuba sino a todos los aliados en la región.
Frente a la pregunta del reportero sobre la complicidad del régimen comunista cubano con la narcodictadura de Nicolás Maduro en Venezuela (donde un promedio de 20 000 soldados cubanos resguardaban a la tiranía), Biden contestó que les será muy difícil respaldar a Maduro, pues está en problemas.
En respuesta, Mercedes Schlapp, asesora principal del presidente Trump, contestó que la postura de Biden implica su respaldo a la dictadura cubana y venezolana. Y destacó cómo Obama “alabó” al régimen comunista cubano durante su presidencia.
Schlapp es hija de exiliados cubanos. Por tanto conoce los horrores del comunismo de primera mano. Con un acento perfecto en español, dijo el nombre de Nicolás Maduro en castellano. Y acusó al régimen comunista cubano de impulsarlo, hecho que Biden niega.
Desde La Habana, el activista político Antonio Rodiles declaró para PanAm Post que el respaldo a Biden es un error y que Montaner no debería dejar que su animosidad hacia Trump (que dejó en manifiesto desde las elecciones del 2016) se convierta en respaldo hacia el partido que busca normalizar al régimen que reprime a los cubanos en la isla.
¿Cuál es su opinión sobre lo dicho por Montaner?
Hoy se discute en los Estados Unidos no solo el futuro de esa nación, sino el rumbo a nivel global. Los demócratas están pujando por una preponderancia de las ideologías de identidad de grupos por encima de la libertad individual como estructura básica o building block de la sociedad. Es muy lamentable que Montaner no comprenda el daño que provocaría el triunfo de esas ideologías y su impacto a nivel global.
Sobre el caso Cuba, ya Biden dijo que regresará a la política de la administración Obama. Algo nefasto para la causa de la libertad de nuestra patria.
¿Cómo afecta su postura a los cubanos que siguen en la isla?
Envía un mensaje confuso y da aliento al régimen que reactiva sus esperanzas de regresar a una política permisiva y de tolerancia ante los abusos y violaciones.
¿Qué le dirías si tuvieses la oportunidad y qué mensaje darías a los cubanos e hispanos en EE. UU. respecto al impacto de las elecciones en la nación?
Está en juego el futuro de la democracia liberal como modelo o paradigma. Si los Estados Unidos pierden su esencia, su liderazgo se verá fuertemente menguando y el mundo lo sentirá. La libertad de Cuba y Venezuela se alejará y la posibilidad de que la élite castrochavista mute, para seguir refinando su poder, se amplían.