La elección presidencial en Estados Unidos afecta no solo a la región, sino al mundo. Donald Trump en la Casa Blanca envalentona a la derecha internacional, en particular en Europa.
«Una victoria de Trump es crucial para nosotros», dijo Iván Espinosa de los Monteros, portavoz en el Congreso de Vox España, reporta The Washington Times.
«Trump ha sido un faro para los movimientos de libertad y conservadurismo en todo el mundo», agregó Espinosa, quien viajó a Washington a principios del 2020 a la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC).
«La votación de Estados Unidos en noviembre es probablemente una de las elecciones más importantes para los conservadores en todo el mundo desde la era Reagan», dijo. «Si Trump pierde, tendríamos que trabajar el doble solo para permanecer en el mismo lugar».
Santiago Abascal @Santi_ABASCAL e Iván Espinosa de los Monteros @ivanedlm abren una interesante vía de diálogo entre VOX y la Administración Trump y el Partido Republicano. Bueno para España teniendo en cuenta el gobierno socialcomunista que hay y que lleva al país a la ruina pic.twitter.com/6ik7vK0r7f
— James Nava (@JamesNavaCom) March 6, 2020
Vox logró convertirse en la tercera fuerza de España, en medio de un Gobierno de coalición socialista donde el líder de Podemos, el partido cuya fundación habría sido financiado por el chavismo venezolano, ocupa la vicepresidencia. Esa misma lucha contra el socialismo internacionalista une a varios partidos a ambos lados del Océano Atlántico.
Según The Washington Times, el partido National Rally, de Marine Le Pen de Francia, el Partido Brexit de Nigel Farage en Gran Bretaña, hasta el Partido Popular Danés antiinmigrante y la Liga del Norte de Italia que enfrenta a la Unión Europea, dicen que temen que una derrota de Trump debiliten sus movimientos.
Recientemente, el líder del Partido Brexit ha expresado públicamente que muchos de los mismos comentaristas británicos que predicen la derrota de Trump frente al demócrata Joseph R. Biden, están haciendo las mismas predicciones falsas de 2016 cuando los medios masivos auguraron que Trump perdería contra la demócrata Hillary Clinton.
Farage apuesta por la victoria de Trump para energizar a los conservadores británicos e inspirarlos a acelerar la separación de Gran Bretaña de la Unión Europea.
Soberanía versus globalismo
Lo que tiene en común Trump con estos partidos es su compromiso contra la agenda globalista y su intromisión en la soberanía de las naciones y por tanto de los individuos.
En un contexto como el actual, en medio de una pandemia, el rol de la Organización Mundial de la Salud (OMS), y por tanto de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), es cuestionado debido al manejo que le ha dado a la pandemia y a su posible complicidad con China por el ocultamiento de información.
Ambas organizaciones internacionales han aprovechado la crisis sanitaria para exigir a las naciones cambios en sus legislaciones a cambio de recibir ayuda humanitaria.
La Administración Trump, con la Agencia Internacional para el Desarrollo (USAID) al frente (y el respaldo de la Administración Bolsonaro en Brasil), ha sido crucial en la cruzada frente a dicho intervencionismo, sobre todo en materia de control de población.
«La ONU no debería usar esta crisis como una oportunidad para avanzar en el acceso al aborto como un «servicio esencial», dijo el administrador interino de USAID de Estados Unidos, John Barsa, mediante una carta al Secretario General de la ONU.
Trump oficializó el retiro de EE. UU. de la OMS, lo cual le quita el 20 % del presupuesto total de la misma.
Esta tendencia de enfrentar a la agenda globalista se ha fortalecido con Trump en la Casa Blanca, por ello los soberanistas de Europa y el mundo lo alientan y anhelan su continuidad en la Casa Blanca.