El presidente Jair Bolsonaro dijo que Estados Unidos, junto con Brasil, está trabajando para «restaurar la democracia en Venezuela».
La reciente visita del canciller de EE. UU. Mike Pompeo a Brasil incluyó conversaciones sobre la situación de la tiranía de Nicolás Maduro y sus consecuencias para la región.
En un mensaje en Twitter, Bolsonaro también dijo que la visita del canciller estadounidense al estado fronterizo de Roraima, «muestra cómo nuestros países se alinean en la búsqueda el bien común». Bolsonaro elogió además la política exterior del presidente de Estados Unidos, también candidato a la presidencia, Donald Trump.
– Parabenizo o Presidente @realDonaldTrump pela determinação de seguir trabalhando, junto com o Brasil e outros países, para restaurar a democracia na Venezuela.
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) September 20, 2020
Críticas desde el “centro”
Como las elecciones presidenciales de EE. UU. se celebran pronto, hubo críticas por las declaraciones de Bolsonaro y la visita de Pompeo por parte del “Centrão”, la casta política de Brasil que alega defender “el centro político”.
El presidente de la Cámara legislativa, Rodrigo Maia (DEM), dijo que la visita «va en contra de las tradiciones de autonomía y orgullo de nuestra política exterior y de defensa», y que fue una «afrenta» a las tradiciones de la política exterior brasileña:
«La visita del secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, este viernes, a las instalaciones de Operación Bienvenida, en Roraima, cerca de la frontera con Venezuela, en un momento en el que solo faltan 46 días para las elecciones presidenciales estadounidenses, es incompatible con la buena práctica diplomática internacional y es contraria a las tradiciones de autonomía y orgullo de nuestras políticas exteriores y de defensa».
«Buscar la paz no significa acobardarse ante tiranos y criminales»
Ante las críticas, el ministro de Estado de Relaciones Exteriores de Brasil, Ernesto Araújo, contestó que «El legado de la tradición diplomática brasileña no incluye la indiferencia hacia nuestros vecinos. En el caso actual de Venezuela, tal indiferencia sería inmoral y pondría en peligro la seguridad de los brasileños».
Mediante un comunicado señaló:
Buscar la paz no significa acobardarse ante tiranos y criminales. La independencia nacional no significa rechazar las alianzas que nos ayudan a defender nuestros intereses más urgentes y nuestros valores más preciados. Promover la integración latinoamericana no significa facilitar la integración de los carteles de la droga. La no injerencia no significa dejar que los delincuentes actúen sin ser molestados.
«El pueblo brasileño es solidario con los pueblos vecinos y la Operación Bienvenida representa esa solidaridad. El pueblo brasileño valora su propia seguridad, y la persistencia en Venezuela de un régimen aliado con el narcotráfico, el terrorismo y el crimen organizado amenaza permanentemente esa seguridad. El pueblo brasileño está profundamente apegado a la democracia y el régimen de Maduro trabaja constantemente para socavar la democracia en toda Sudamérica», agregó.
No hay «autonomía y orgullo» en ignorar el sufrimiento del pueblo venezolano o en descuidar la seguridad del pueblo brasileño, espetó. Declara cómo el Gobierno actual de Brasil busca romper una espiral de inercia irresponsable y de silencio cómplice, o de colaboración descarada practicada durante 20 años frente a las crecientes desgracias del régimen de Chávez-Maduro.
«La triste historia de la diplomacia brasileña para Venezuela entre 1999 y 2018 es un ejemplo de ceguera y sumisión ideológica, altamente perjudicial para los intereses materiales y morales del pueblo brasileño y de toda América Latina», afirma Araújo.
Americans have been the world leader in health and humanitarian provision for decades. I just saw firsthand in Brazil what America is doing with our partners to help suffering people who have fled the nightmare in Venezuela. We love our neighbors like no other nation. pic.twitter.com/ViROeyQHG1
— Secretary Pompeo (@SecPompeo) September 20, 2020
EE. UU. aporta millones de dólares para ayudar a los refugiados venezolanos en Brasil
El canciller recordó en un comunicado que los Estados Unidos ya donaron 50 millones de dólares para la Operación Bienvenida y que el secretario Mike Pompeo anunció la donación de 30 millones de dólares adicionales.
Es una cantidad enorme, asegura, dado que el Gobierno brasileño ya gastó 400 millones de dólares en esta operación. Estados Unidos también ha dedicado cantidades significativas para ayudar a acoger a inmigrantes y refugiados venezolanos en Colombia y otros países. Brasil y Estados Unidos, por tanto, están a la vanguardia de la solidaridad con el pueblo venezolano, oprimido por la dictadura de Maduro, sentenció.
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) September 20, 2020
Como ministro de Relaciones Exteriores, Araújo denunció que Maduro y los ministros de su régimen cometieron crímenes de lesa humanidad al practicar sistemáticamente tortura, asesinatos, detenciones arbitrarias y otras atrocidades.
Según estipula la Constitución, anuncia que Brasil continuará trabajando, más que nunca, para exponer el sufrimiento de los venezolanos ante la atención mundial y trabajará a favor de la redemocratización de Venezuela, lo cual considera la única vía para el retorno del país hacia el respeto a los derechos humanos.
Só teme a parceria Brasil-EUA quem teme a democracia.
??+?? por uma ?? livre
São infundadas as críticas do Presidente da Câmara Rodrigo Maia à visita que o Secretário de Estado Mike Pompeo e eu fizemos ontem à Operação Acolhida em Boa Vista, conforme procuro mostrar nesta nota: https://t.co/LOpsEyyekM
— Ernesto Araújo (@ernestofaraujo) September 19, 2020
Araújo dice estar muy orgulloso de contribuir, junto con el secretario de Estado Mike Pompeo, bajo el liderazgo de los presidentes Bolsonaro y Trump, a construir una asociación fructífera y profunda entre Brasil y Estados Unidos, las dos democracias más grandes de América. «Solo los que temen esta asociación son los que temen la democracia», sentenció.