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En la provincia de Buenos Aires el frente oficialista Cambiemos, la fuerza política de Mauricio Macri, está luchando mano a mano el primer puesto en la elección del senado contra la expresidente Cristina Kirchner. La paridad en las encuestas llevaron al presidente argentino a hacer una aparición de campaña en la ciudad de Tandil, su pueblo natal, donde defendió el rumbo del gobierno.
Con la nueva metodología de los actos políticos en Argentina, escenario en el centro y ante un grupo limitado de dirigentes locales y candidatos, pero lejos de cualquier búsqueda de masividad, el presidente Macri pidió el voto, junto a la gobernadora María Eugenia Vidal, para los candidatos “honestos” del frente oficialista, en clara referencia al espacio kirchnerista con quienes debaten la elección.
“Estábamos al borde de otra crisis como en el 2001. Elegimos reconocer los problemas y encararlos con la verdad y las manos limpias”, advirtió Macri en la presentación del Club Independiente de su ciudad.
En otra referencia al gobierno anterior el presidente llamó a los votantes a “volver a ganarle al miedo” y destacó que los que “hoy tienen las soluciones para todos los problemas, dejaron un país en ruinas”.
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La gobernadora de la provincia, María Eugenia Vidal, también participó del acto de campaña buscando impulsar a los candidatos de su espacio que dirimirán la elección contra Cristina Fernández de Kirchner:
“Somos gente honesta que no especulamos, no somos mezquinos. No son candidatos testimoniales, ni quieren ser presidentes. Vienen a ayudarnos”, resaltó buscando marcar diferencias con las candidaturas de Kirchner, Massa y Randazzo, posibles candidatos presidenciales en 2019.
Fuente: Infobae
