Esta mañana el caos de tránsito en la zona centro de la Ciudad de Buenos Aires fue total producto de los cortes realizados por las columnas de manifestantes sindicales que marcharon rumbo a Casa Rosada, protestando por el supuesto “ajuste” que estaría llevando a cabo el gobierno de Mauricio Macri.
En la jornada de hoy la presencia del espectro sindical fue incompleta, ya que el sector de los denominados “Gordos” (gremios de los servicios) decidieron tomar distancia de la protesta, luego de los resultados favorables para el macrismo en las primarias de la semana pasada.
La polémica comenzó desde temprano con una entrevista radial, cuando Hugo Yaski, candidato a diputados por el kirchnerismo y cabeza de la Central de Trabajadores de Argentina, defendió a Nicolás Maduro:
“La realidad de Venezuela es mucho más compleja que como se la pretende ver desde los medios de la derecha. Hay que respetar el derecho de los pueblos a encontrar su propio camino”, argumentó el sindicalista.
“De ninguna manera es una dictadura. Son procesos que tienen su propio tiempo”, resaltó el cabecilla de la CTA.
Las declaraciones del sindicalista con relación a Venezuela llegaron a los medios de comunicación en simultáneo con el principio del acto, generando satisfacción en el gobierno. “Que sigan hablando”, comentó este mediodía una alta fuente del Poder Ejecutivo.
Otra imagen que se repitió en los medios de comunicación esta tarde fue la de los violentos enfrentamientos que tuvieron lugar en Plaza de Mayo entre las mimas agrupaciones sindicales. Según el diario La Nación el conflicto comenzó con una disputa interna dentro del espacio del gremio de Camioneros.
“Nos acusan de que somos un freno para las inversiones y un atraso para nuestro país. Somos hijos del peronismo, una década dorada en nuestro país, en donde el pueblo vivió los años más felices. Rechazamos cualquier acusación que diga que nosotros atrasamos la modernización de este país”, manifestó en su discurso el gremialista Juan Carlos Schmid.
La jornada terminó sin anunciar un paro general, decisión que quedará sujeta a las próximas reuniones de la Central General de los Trabajadores, donde tendrán que consensuar los sindicatos más vinculados con el gobierno y los más combativos.