Entre todos los proyectos comunicacionales subsidiados por el Estado desde 2003 en Argentina, Carta Abierta fue uno de los más conocidos. Se trata de un grupo de intelectuales formado por escritores, filósofos y periodistas, que defendieron las posturas más radicales del kirchnerismo. Ahora, en la oposición y sin fondos públicos, sus apariciones son más escuetas, pero no por esto, menos ridículas.
Ante el acuerdo del Gobierno argentino con el Fondo Monetario Internacional, Carta Abierta emitió un comunicado llamando al Parlamento a votar en contra del mismo, argumentando que se trata de una pérdida de soberanía nacional. El economista José Luis Espert, les respondió que por “pudor”, deberían “cerrar la boca”.
Claro que ante el incremento del endeudamiento del Estado argentino, caben las críticas de seguir hipotecando el futuro, pero las mismas no son compatibles con la visión de Carta Abierta. Los intelectuales liberales, que llaman la atención sobre el déficit fiscal y el gasto gubernamental, tienen un punto al criticar el permanente endeudamiento del Gobierno, que evita hacer los recortes del gasto necesario. Las críticas ante el acuerdo con el Fondo por parte del kirchnerismo, son contradictorias. Por un lado quieren seguir gastando y emitiendo billetes, pero no dicen como piensan reducir el rojo fiscal y terminar con la inflación.
¿Volver al cepo cambiario?
Entre las propuestas populistas de la carta de los intelectuales kirchneristas, donde hacen referencia a la necesidad de retornar a un modelo de estatismo exacerbado, probablemente la más indignante, es la sugerencia al retorno del control de cambios. Aunque resulte increíble, Carta Abierta quiere frenar la escalada de la moneda norteamericana con “la recuperación del dispositivo regulatorio del mercado de cambios”. También insistieron con el proyecto más autoritario del kirchnerismo: la “ley de medios”.
“Es necesario oponer al programa del Fondo uno propio cuyos lineamientos principales no pueden omitir la reposición de los instrumentos de regulación al movimiento de capitales, la recuperación del dispositivo regulatorio del mercado de cambios, la implementación de una institucionalidad que permita la intervención y regulación del comercio exterior por parte del Estado, la dinamización de las paritarias para la recuperación del salario, la implementación de una ley de medios de comunicación que termine con la censura privada a las expresiones que no coinciden con los requerimientos del poder mediático, financiero y económico, y una reforma judicial profunda que concluya con la articulación del Poder Judicial con el establishment económico y político de nuestro país”.
Por pudor, cerrar la boca
En diálogo exclusivo con PanAm Post, el economista José Luis Espert cuestionó el comunicado del grupo kirchnerista. Para el autor del bestseller “La Argentina devorada”, los intelectuales de Carta Abierta tuvieron la posibilidad de gobernar durante doce años y dejaron al país rumbo al camino venezolano que terminó en una tragedia humanitaria. “Por pudor deberían cerrar la boca”, manifestó Espert.