Cuando Cristina Fernández de Kirchner soñaba con reformar la Constitución para quedarse en el poder, no fue la política ni la justicia la que le puso un freno. Los argentinos de a pie se autoconvocaron en una marcha multitudinaria que fue una clara señal para la oposición y para los jueces: la sociedad estaba harta y no quería someterse a un proceso que tenía riesgos de terminar como el chavismo.
Luego apareció Cambiemos, Mauricio Macri ganó las elecciones y la justicia se despertó luego de un gran letargo. Hoy, a tres años del final del kirchnerismo, la sociedad se vuelve a manifestar. En esta oportunidad es para que los senadores voten el desafuero contra Cristina, para que pueda ser detenida tras los escandalosos hechos de corrupción de su Gobierno.
La cita es el próximo martes 21 de agosto a las 19 horas frente al Congreso Nacional, un día antes de la próxima reunión del Senado donde se tratará, ya seguramente con éxito, la aprobación para que la justicia pueda allanar su propiedad. Es de esperar que la marcha pida más. Habrá que ver la trascendencia de la convocatoria, ya que no sorprendería que de esto dependa la actitud de los senadores argentinos. No sería la primera vez que la gente en las calles le marca el camino a la clase política y le tira de las orejas al sistema judicial.
El escándalo del día
Desde que explotó el “cuadernogate” que no pasa un día sin que se destape un nuevo escándalo. El de hoy compromete directamente a la exmandataria. El empresario Gabriel Romero admitió haber pagado USD $600.000 para que Cristina Kirchner firmara un decreto para una obra pública que lo beneficiaba. El hecho está detallado en los cuadernos del chofer Centeno, que se desempeñaba en el ministerio de Planificación de Julio De Vido.
“13.35. Ministerio, lo llevé al Lic y a Nelson a Corrientes 316, donde nos esperaba un señor. Luego subió al edificio con el Lic Baratta; luego bajaron con un bolso con dinero aproximadamente por el tamaño unos 800.000 dólares, subió al auto con el bolso el Lic. y los llevé al Ministerio”, está escrito en uno de los cuadernos del escándalo. A pesar que la suma era de USD $600.000 en lugar de USD $800.000, el empresario reconoció el hecho de corrupción ante la justicia.
Macri habló de una “nueva Argentina”
El presidente participó este mediodía en un acto por un nuevo programa de protección de fronteras e hizo referencia al escándalo de los cuadernos. Para Mauricio Macri, la acción de la justicia sobre los hechos de corrupción del kirchnerismo muestran el nacimiento de una “nueva Argentina” que se enfrenta a “cualquier comportamiento mafioso”.