El exministro argentino Domingo Cavallo aseguró que el Banco Central ha “perdido la capacidad del control sobre la emisión monetaria”. Para el histórico economista, esa supuesta pérdida de control por parte del monopolio monetario fue lo que desencadenó en el control de cambios impuesto por el presidente Mauricio Macri recientemente.
En la opinión de Cavallo, si no hubieran sido introducidos los controles, la situación se hubiera puesto mucho más complicada para el Gobierno de cara a las elecciones del 27 de octubre. Sin embargo, advierte que la situación puede volverse muy complicada en cualquier momento: “Si no perfeccionan las medidas con un desdoblamiento que viabilice un mercado libre para las transacciones no comerciales, el descontrol monetario llevaría rápidamente a una hiperinflación”, señaló.
Sobre la posibilidad concreta de una nueva hiperinflación en Argentina, el economista resaltó que aunque no se produzca a fin de este año, el desastre podría tener lugar en cualquier momento de 2020 o 2021.
Con respecto a los vencimientos de deuda en dólares, Cavallo aseguró que “es probable” que el Estado “disponga la suspensión de los pagos”. “Es clave que los asesores económicos de los candidatos presidenciales adviertan los peligros que aparecen en el horizonte y no sean complacientes”, manifestó el exministro.
El superministro de los noventa y el fracaso de 2001
Domingo Felipe Cavallo (73) llegó al Congreso a finales de los ochenta como diputado, pero pasó a la política grande de la mano del expresidente Carlos Menem. En el inicio del mandato del riojano fue designado ministro de Relaciones Exteriores, pero luego pasó a la cartera de Economía (1991), donde aplicó el último gran plan que tuvo el país: la convertibilidad. Luego de un proceso hiperinflacionario, Cavallo aplicó una caja de conversión y lanzó el peso (que reemplazó al austral) en paridad con el dólar. El programa se conoció popularmente como el “1 a 1”.
Durante los mandatos de Menem, Argentina tuvo sus períodos con menor inflación en la historia moderna. Se alejó del Gobierno luego de denunciar diversos hechos de corrupción política y judicial, pero volvió al cargo cinco años después durante el mandato de Fernando de la Rúa.
Allá por 2001, el último presidente radical había convocado a Ricardo López Murphy por una grave crisis económica, pero no le dio el apoyo necesario para desarrollar su programa. Cavallo asumió con la promesa de salir sin necesidad de un ajuste, pero el FMI le soltó la mano al Gobierno y cayeron Cavallo y de la Rúa en medio de una situación de violencia en las calles. Se trató de la última gran crisis argentina, donde los ahorristas vieron confiscados sus depósitos bancarios, en lo que se conoció como el “corralito”.