En la política argentina el debate acerca de la legalización de las drogas estuvo limitado a la despenalización de la marihuana. Esta propuesta incluso estuvo relacionada exclusivamente con los espacios más vinculados a la izquierda. Ahora, desde el ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, llegó una idea que hasta el momento no formaba parte de la discusión: la legalización total, no solamente del consumo, sino de la comercialización, y no solamente de la marihuana, sino de todas las drogas.
Sergio Berni participó anoche de un mano a mano con el periodista Luis Novaresio y el tema del narcotráfico, uno de los principales problemas en el territorio bonaerense, irrumpió en la entrevista. El flamante ministro de Seguridad de la provincia más grande de Argentina salió con una respuesta que tomó por sorpresa al popular periodista: propuso “cambiar el paradigma”. “Si vamos a hacer reformas, hagámoslas en serio”, manifestó Berni.
“Los que intentan relacionar al narcotráfico con la drogadicción no entienden nada. El narcotráfico está vinculado a la violencia y a la corrupción. Los países que tienen estadísticas serias demuestran que las adicciones más complicadas no están relacionadas con sustancias prohibidas, sino que están vinculadas al consumo de alcohol y los psicofármacos, drogas legales”, señaló.
El funcionario reconoció que no se puede tratar este tema “de la noche a la mañana” porque la sociedad “no está lista” para el debate, pero advirtió que es momento de “comenzar a estudiar” alternativas luego del “fracaso de la doctrina Nixon” en Estados Unidos y en todo el mundo.
Con relación a la diferencia del abordaje de la marihuana y la cocaína, Berni indicó: “O se hace todo o no se hace. Eso de que la marihuana es una droga blanda y la cocaína no, es verso para la gilada. Si vamos a generar importantes reformas, que sean verdaderas”, indicó.
Para Berni el abordaje del narcotráfico debería ser diferenciado del problema de la adicción, lo que señaló como un problema de “salud pública” a trabajar desde la prevención y que no está limitado al problema de las drogas ilegales. “Si usted va a una sala de un hospital y ve los chicos que llegan intoxicados, la mayoría no es ni por la cocaína, por la marihuana o por el paco, es por intoxicación etílica”, resaltó.