Los diplomáticos que representan a la dictadura venezolana en el territorio brasileño fueron declarados «persona non grata» en ese país, según una comunicación emitida por la cancillería. Esta medida aunque no constituye una “expulsión” deja sin efecto tanto el estatus, como la inmunidad y los privilegios propios de los cargos.
Esta decisión emitida por el Gobierno de Jair Bolsonaro, que solo reconoce a Juan Guaidó como “presidente legítimo e interino” de Venezuela, fue comunicada a los representantes del régimen de Maduro, informó la agencia EFE.
Desde inicios de este año, Brasil ha retirado gradualmente sus diplomáticos en Venezuela. Hasta los momentos, el personal local es quien se encarga de desempeñar funciones de esta naturaleza, de modo que la comunidad brasileña recibe la atención necesaria dentro de la nación sudamericana.
En materia diplomática, el Gobierno de Bolsonaro reconoció a María Teresa Belandria, una de las personas designadas por Guaidó, como embajadora venezolana en Brasil. Este movimiento despertó tensiones con el régimen de Nicolás Maduro, pero a pesar de eso no se han suspendido las relaciones diplomáticas bilaterales.
Previamente, en el mes de abril Bolsonaro ordenó el regreso de los diplomáticos venezolanos a su país, bajo el argumento de haber llegado a un acuerdo con la dictadura venezolana, que diera paso a una retirada mutua.
Sin embargo, Maduro negó los pactos que mencionaba el presidente brasileño y la orden de regreso fue suspendida por el fiscal general de Brasil, Augusto Aras. Dicha medida afectaba en aquella oportunidad a 34 diplomáticos venezolanos que laboraban en la embajada de Brasil.