Este sábado 9 de abril, el senador de Vermont, Bernie Sanders, aspirante a la Casa Blanca por el bando demócrata, ganó en las elecciones primarias de Wyoming, de acuerdo con las proyecciones de los medios.
“Está bien. Boletín de noticias. Acabamos de ganar Wyoming…”, dijo Sanders esta tarde, frente a los aplausos de una audiencia que lo escuchaba en Nueva York, mientras hacía campaña.
“Creo que es muy justo decir que cuando comenzamos esta campaña era considerado un candidato marginal”, señaló el senador de Vermont, de 74 años, para luego indicar que “es muy justo decir que estábamos muy, muy por detrás durante la primera mitad de esta carrera, pero estamos teniendo —por decir lo mínimo— una muy fuerte segunda mitad, y nos estamos acercando muy rápido”, concluyó.
Sanders obtuvo 56 % en contra de su rival, Hillary Clinton, que pudo lograr un 44 % en el último enfrentamiento antes de las cruciales elecciones en Nueva York.
Este sábado, estaba en juego la cifra de 14 delegados, siendo las primarias de Wyoming en las que se otorga menos delegados a la Convención.
Sin embargo, para Sanders, haber obtenido la victoria hoy, le da un fuerte impulso a su candidatura al constituir su séptima victoria consecutiva.
De esta manera, después de los resultados de este sábado, Clinton aún se mantiene a la delantera con 1.268 delegados.
Sanders, por su lado, alcanzó la cifra de 1.037 delegados, acercándose cada vez más a su contrincante.
No obstante, cuando se toman en cuenta los denominados superdelegados —dirigentes del partido que pueden apoyar al candidato que deseen—, la ventaja de la exsecretaria de Estado sobre el senador se eleva considerablemente: 1.775 contra 1.068.
Tanto Hillary Clinton como Bernie Sanders, estuvieron este sábado haciendo campaña en Nueva York, donde se llevarán a cabo las primarias del 19 de abril y donde está en juego la crucial cantidad de 291 delegados.
Para asegurar la postulación presidencial, hace falta lograr la cantidad de 2.383 delegados.