El expreso político José Luis Santamaría irrumpió en una rueda de prensa del presidente de la Asamblea Nacional. Los anuncios de Julio Borges estarían relacionados con el diálogo entre el gobierno y la coalición de partidos “opositores” Mesa de la Unidad Democrática.
“¡Basta de traición, Julio Borges! ¡Basta de traición al pueblo venezolano! Hemos sufrido como presos políticos en las calles. Hemos sufrido las cárceles. Siguen compañeros presos y ustedes no escuchan lo que les dicen. ¡Basta de traición!”, increpó el expreso político al presidente del Parlamento mientras hablaba a los medios.
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“¡El pueblo pide cambio! ¡Venezuela pide que escuchen a los ciudadanos! ¡Queremos libertad! ¿Hasta cuándo la traición?”, continuó espetando quien había sido detenido por las fuerzas del Estado durante las manifestaciones que se generaron en Venezuela en contra de la dictadura en el año 2014.
La Mesa de la Unidad Democrática es actualmente una plataforma en decaimiento. Luego de que las protestas menguaran por diferentes factores; entre otros que no se acatara el mandato del dieciséis de julio y luego de que se decidiera participar en las elecciones regionales, el ciudadano empezó a perder la confianza.
Aunado a ello, ahora la MUD ha reactivado el diálogo con la dictadura en República Dominicana sin preguntar a nadie. Son encuentros a los que asisten Borges y el diputado de Voluntad Popular, Luis Florido. Diálogo que carece de respaldo de la sociedad y que ha generado rechazo entre los ciudadanos.
Esto último fue, de hecho, lo que también provocó el asedio de Santamaría a Borges. En unas declaraciones posteriores al incidente, el expreso aseguró que la oposición “debe exigir la liberación de todos los presos políticos” antes de cualquier negociación.
Aunque es una condición que muchos establecen; la dirigencia se ha sentado con la dictadura sin exigir primero la libertad de los secuestrados. En cambio, en las últimas semanas el régimen ha acentuado la represión contra la disidencia.
“Lamentablemente siguen incoherentes a la realidad que vivimos. El país pide coherencia, que no se hagan diálogos sordos, pide un cambio político”, dijo Santamaría a los medios.
Asimismo, pidió a la Mesa de la Unidad Democrática hablar “claro al país”. “Es necesario que se escuche la realidad, porque se necesitan cambios sustanciales”, aseveró José Luis Santamaría.
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"Diálogo de sordos": Ex preso político, José Luis Santamaria, sostiene que oposición debe exigir liberación de todos los presos políticos antes de negociar en Dominicana l @venezuelaaldia #27Nov. pic.twitter.com/JrdOUtFusD
— Pedro Eduardo Leal (@PedroELeal) November 27, 2017
Disconformidad y el surgimiento de una alternativa
Desde hace un tiempo destacable, el rechazo a la Mesa de la Unidad Democrática por parte de la misma sociedad opositora se ha acentuado. No es un sentimiento reciente. Durante el año pasado hubo importantes decepciones: varios encuentros de diálogos ya denunciados; un referendo revocatorio que se defendió y el control que se estableció sobre una ciudadanía que buscaba desesperadamente expresarse en las calles. Sin embargo, las últimas acciones han terminado de dilapidar a la coalición electoral.
Las protestas que se generaron en el país este 2017 no fueron convocadas por la Unidad; pero al final, fue la MUD la que logró capitalizarlas. Se perdió la partida y la dictadura ganó, a pesar de que se encontraba en su momento más difícil. Al final la Mesa de la Unidad decidió participar en un proceso electoral orquestado por los criminales, volvió a ceder para reunirse en República Dominicana sin condiciones apropiadas y dieron la espalda al mandato del pasado dieciséis de julio. Pero ahora hay una alternativa, que gana fuerza con los días.
Soy Venezuela nació en medio de una coyuntura oportuna para la constitución de una verdadera opción. Una plataforma que fundó la dirigente María Corina Machado junto con otros líderes. Recientemente se anunció quiénes conforman con formalidad la alianza: intelectuales, activistas y empresarios resalta. Todos en torno a una nueva organización cuyo objetivo es la salida de Nicolás Maduro en el menor tiempo posible.