El pasado lunes, a través de una cadena nacional, el presidente de Venezuela Nicolás Maduro advirtió que “sencillamente no habrá relaciones cordiales ni habrá comunicación cordial” con Estados Unidos hasta que Washington comprenda que debe respetar al país soberano.
Maduro comenzó la semana expulsando del país a tres diplomáticos pertenecientes a la Embajada de Estados Unidos, alegando sabotaje a la economía venezolana. Kelly Keiderling, la encargada de negocios de Washington en la Embajada, junto a Elizabeth Hunderland y David Mutt “tienen 48 horas para dejar el país,” declaróMaduro en la televisión estatal.
“¡Fuera de Venezuela! ¡Yankees go home!”, gritó. Aseguró que hay “evidencia” de que los oficiales de la Embajada impulsaron actos de “sabotaje al sistema eléctrico y la economía” en conjunto con la oposición y otros traidores a la Revolución.
“Rechazamos por completo las acusaciones del Gobierno de Venezuela de la implicación de Estados Unidos en ningún tipo de conspiración para desestabilizar al gobierno de Venezuela”, declaró a través de un comunicado la Embajada de Estados Unidos en Caracas. La Casa Blanca y el Palacio de Miraflores no han tenido embajadores recíprocamente desde 2010, lo cual significaba que Keiderling era la funcionaria de mayor rango.
Henrique Capriles Radonski, el candidato de la oposición que perdió por pocos puntos las elecciones presidenciales frente a Maduro la primavera pasada, calificó las expulsiones como una “cortina de humo” para tapar las fallas económicas del gobierno.
Las alertas del chimbón en Miraflores nadie se las cree,puro humo para tapar que no puede con el país! #Cambio8D
— Henrique Capriles R. (@hcapriles) September 30, 2013
Fuentes: Agencia Venezolana de Noticias. Leer más » Global Post. Leer más »