La Fiscalía General de Venezuela comunicó este domingo la liberación de 173 personas de las 243 que habían sido detenidas mientras acampaban en las calles como protesta contra el gobierno de Nicolás Maduro.
155 de los jóvenes deberán presentarse periódicamente ante los tribunales, medida criticada severamente por las ONG locales de Derechos Humanos (como Provea), por considerarla un acto de criminalización de la protesta. A tres de los manifestantes se les liberó bajo fianza y cinco deberán ser sometidos a tratamientos médicos para “su plena recuperación en cuanto al consumo de drogas”.
Según un comunicado de la Fiscalía, ocho de los detenidos en la redada contra los campamentos fueron trasladados a una cárcel en el centro de Caracas y tres a los calabozos del Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN) por delitos como “porte ilícito de arma de fuego”, “incitación a la desobediencia”, “daños violentos a la propiedad”, “agavillamiento” o “asociación para delinquir”.
El jueves pasado, en horas de la madrugada, la Policía Nacional Bolivariana y la Guardia Nacional Bolivariana desmanteló estos campamentos en el Este de Caracas. Las detenciones causaron una reactivación de las protestas contra el gobierno a nivel nacional, que en sus tres meses dejan un saldo de 42 muertos, 800 heridos y 2.800 detenidos (de los cuales 161 siguen presos).
Fuente: Reuters.