EnglishEl pasado jueves el Congreso de Perú aprobó la nueva Ley Universitaria que crea una Superintendencia Nacional de la Educación Universitaria (SUNEU) que reemplazará a instituciones como la Asamblea Nacional de Rectores (ANR) y al Consejo Nacional para la Autorización de Funcionamiento de Universidades (CONAFU).

La reciente legislación fue promovida por el parlamentario Daniel Mora del partido Perú Posible. “Esta ley fundamentalmente busca incrementar de manera sustancial la calidad educativa. Por ejemplo, en la ley se dice que tenemos que tener profesores en las universidades con el grado mínimo de maestría”, afirmó el congresista Mora en conferencia de prensa.
“Con esta ley, para que nazca una universidad se deben reunir requisitos básicos de calidad. Si un proyecto de universidad no reúne condiciones mínimas de calidad no se le va dar licencia”, señaló el titular de la Comisión de Educación.
Además, indicó que las universidades existentes también serán evaluadas. “Se va evaluar qué universidad merece seguir siendo llamada universidad, se le dará plazos para que incremente su calidad, y si no cumple será cerrada”.
Entre los sectores críticos a la legislación está la Confederación Nacional de Instituciones Privadas (CONFIEP). El presidente del más importante gremio empresarial, Alfonso García Miró, expresó su preocupación por esta norma, pues según él, no se escucharon los comentarios y sugerencias de las partes involucradas, lo cual da una mala señal a todos los empresarios.
Recordó que muchos dueños de empresas privadas consideran intervencionista esta iniciativa por ser restrictiva con el capital privado y porque “expropia la gestión de dichas instituciones académicas al someterlas al control de una superintendencia estatal creada para ese fin”. Precisó que la norma no tendrá un efecto positivo en la educación universitaria, como el que pretenden sus promotores, sino uno totalmente contrario.
Fuente: El Comercio.